Y por fin llegó el último día de nuestro viaje. Nuestras familias anfitrionas acercan a los niños al colegio. Besos, abrazos y deseo de volvernos a encontrar algún día. Agradecimiento sincero por nuestra parte y sensación de haber establecido vínculos con personas increibles que a pesar de la distancia a partir de ahora las tendremos como muy cercanas.
Nos subimos en el autobús y partimos hacia la increible ciudad de Praga, donde hacemos la primera parada en la Casa Danzante, increible y moderno edificio donde admiramos su museo de cristal de Bohemia y unas vistas espectaculares del río Moldava. Después de un rico batido de cacao subimos al autobús.
El trayecto en autobús a través de la ciudad nos lleva al Castillo de Praga y la catedral gótica de Wenceslao. En los alrededores tenemos la suerte de presenciar el cambio de la Guardia del Palacio, música incluida. Después iniciamos la bajada hacia la ciudad vieja por la ladera de los jardines del Palacio Imperial. Llegamos atravesando el puente de Carlos, donde sus más de 500 metros ofrecen una vista espectacular de la capital de la República Checa.
Llegando a la plaza de la ciudad vieja, auténtico punto neurálgico de la ciudad, admiramos el antiquísimo Reloj Astronómico, el cual a la hora en punto nos ofrece el espectáculo de sus figuras móviles.
Una vez acabado este recorrido, encaminamos nuestros pasos hacia el autobús donde nos despedimos de los profesores anfitriones que con tanta amabilidad nos han tratado estos días. Nuestros alumnos y alumnas se despiden de sus nuevos amigos. Besos, abrazos y alguna lágrima, reflejo evidente de la intensidad que han vivido estos días en una experiencia que sin duda marcará sus vidas de ahora en adelante. Han salido al mundo, se han enfrentado a la necesidad de comunicarse en otro idioma, han probado comidas nuevas, visitado sitios increibles y, en fin, han ensanchado su visión global y vuelven completamente distintos.
Nos dirigimos a nuestro hospedaje, donde disfrutamos de una cena reparadora para un día en el que hemos caminado alrededor de 14 kilómetros. Nos vamos a dormir y en pocas horas tomaremos nuestro vuelo de vuelta hacia Alicante.
La próxima parada aguarda a otro grupo de nuestros estudiantes el próximo día 24 de Noviembre en la localidad Italiana de Tarquinia, cerca de Roma. En esta ocasión el proyecto será sobre Robótica y Arduino.
