Un año más estamos a las puertas del mes de mayo, mes que los cristianos dedicamos a nuestra MADRE, la virgen MARÍA.
María dijo SÍ. Sus miedos y dudas no la frenaron, ella siguió adelante aceptando la voluntad de DIOS.
A pesar de las dificultades, sufrimientos, desengaños… nunca perdió la FE ni la CONFIANZA en ÉL.
Fue humilde, sencilla, alegre y ofreció su vida a cuidar, amar y servir a Jesús y a todos los que tenía cerca.
Aprovechemos este mes para acercarnos a ella, conocerla mejor y esforzarnos en imitarla.
El departamento de Pastoral