Archive for » 2016 «

Si te pienso quiero verte…

Me gusta poder contar contigo, me hace feliz al tiempo que me reconforta.

Me gusta saber que siempre encontrarás la forma de hacerme reír aun cuando me sienta muy triste, que me protegerás en las frías y gélidas noches de invierno, y no dejarás que el hastío me consuma jamás.

Me gusta que seas tan polifacético y que desprendas esa sensibilidad; me conmueve y despierta mi admiración.  Siempre sabes qué decir y desde luego lo haces con gran ingenio.

Me gusta tu infinita creatividad y que siempre me sorprendas con algo nuevo. Me gusta que vivas la vida con pasión, que seas un romántico empedernido al que le entusiasman las historias de acción.

Me gusta tu original manera de concebir el mundo, incluso tu rocambolesca percepción futurista del mismo, consigues que parezca tan real…

Me gusta tu sentido del humor, el fácil, el pícaro y el inteligente.

Me gusta tu manera de contar hasta las más sencillas anécdotas, pues tu voz hace que suenen diferentes. Sólo ella sabe envolverlas de ese halo de misterio e intriga que las hace  sumamente especiales.

Me gusta que encuentres inspiración hasta en los detalles más simples, para convertirlos después en algo hermoso y extraordinario.

Me gusta tu carácter altruista y generoso, libre y espontáneo, filantrópico y arrollador, porque me mantienes expectante y destruye lo predecible, convirtiendo mi vida en un torrente de emociones.

Me gusta tu manera de conectar con las personas, tienes lo que se suele decir “don de gentes”, pero sin resultar nunca arrogante.

Me gusta que estés en todo y que nunca te olvides de nadie, de los niños y de los no tan niños, para dedicarnos parte de tu maravilloso tiempo.

Me gusta todo de ti, hasta tu nombre… ¡CINE! Al pronunciarlo siento que necesito verte…

He aquí algunas de tus mejores versiones…

Inception

Aitana Palao, 2ºESO B

Título original: Inception

Título en castellano: Origen

Dirección: Christopher Nolan

Reparto: Leonardo DiCaprio, Ellen Page, Marion Cotillard, Joseph Gordon-Levitt, Tom Hardy, Cillian Murphy, Ken Watanabe, Michael Caine

Fecha de estreno: 6 de agosto del 2010

Duración: 148 minutos

Género: Ciencia ficción. Thriller. Intriga. Acción. Thriller futurista. Robos & Atracos

País: Estados Unidos

Guión: Christopher Nolan

Fotografía: Wally Pfister

Efectos especiales: Paul Franklin, Chris Corbould, Andrew Lockley, Peter Bebb

Banda Sonora: Hans Zimmer

Presupuesto: $160.000.000

Recaudación: $825.532.764

Óscar: Nominados: Mejor película

Mejor guión original

Mejor dirección de arte

Mejor banda sonora

       Ganados:     Mejor fotografía

Mejor edición de sonido

Mejor sonido

Mejores efectos visuales

Dom Cobb (DiCaprio) es un experto en apropiarse de las ideas del subconsciente ajeno a través de los sueños. Esta habilidad lo ha convertido en un hombre muy buscado tanto por la ley como por sus posibles clientes. Antes de que todo esto ocurriera, él era una persona normal, hasta que las circunstancias cambiaron y desde entonces dejó de tener una vida tranquila y corriente. Un día un extraño y peculiar hombre le presenta la oportunidad de volver a su vida anterior, sólo tiene que recurrir a la incepción, que consiste en implantar una idea en el subconsciente del heredero de una gran empresa. Para ello recurre, entre otros, a la joven arquitecta Ariadne (Ellen Page). Pero encontrará una gran traba en su camino. Una piedra con la que ya tropezó, y Cobb no sabe si estará psicológicamente preparado para enfrentarla de nuevo.

??????????????????????

El laberinto de los sueños

Sorprendente, inigualable, con giros inesperados y efectos buenísimos. Si me dijeran que tengo que describir Inception en  sólo unos pocos adjetivos, sin duda, elegiría los anteriores. Los efectos visuales y sonoros son exquisitos, merecedores de los Óscar recibidos; pero una película no sería lo que es sino contase con un magnífico guión, y una excelente dirección, a cargo, cómo no, del genio Chritopher Nolan .

Pasemos a la banda sonora, banda sonora que te deja los pelos de punta, es sencillamente impecable. Nolan cuenta con el gran Hans Zimmer, con el que trabajó anteriormente en Batman Begins (2005) y The Dark Knight (2008). Y después de Inception, en dos películas más. La música se ajusta perfectamente a las imágenes y a los momentos de acción, cuando pasa algo repentino, la música se acelera, y cuando es un momento más calmado, sigue la melodía pero no se descompasa en ningún momento de las imágenes y los acontecimientos del largometraje.

Y para acabar el reparto, también espléndido. DiCaprio, para mí, representa uno de los mejores papeles dentro de su larga carrera como actor. Además de Ellen Page, Marion Cotillard, Joseph Gordon-Levitt y Tom Hardy, cuya interpretación te transporta directamente al mundo de los sueños, te sumerges tanto en la aventura, que ni te das cuenta de que estás en la sala de un cine.

En definitiva, una película, incluyendo a todo el mundo que está detrás y la hace posible, extraordinaria, que te deja un buen sabor de boca. Que te hace pensar y reflexionar.

Indiana Jones. En busca del arca perdida

Jordi Sanz, 2ºESO A

Título: Indiana Jones. En busca del arca perdida.

Año: 1981

Duración: 115 min.

País: Estados Unidos

Director: Steven Spielberg

Banda Sonora: John Williams – Jäger des verloren Schatzes

Reparto: Harrison Ford, Karen Allen, Paul Freeman, Ronald Lacey, John Rhys-Davies, Vic Tablian, Denholm Elliott, Wolf Kahler, Alfred Molina, George Harris.

Género: Aventuras. Acción. Nazismo.

Indiana Jones

Sinopsis:

En Busca del Arca Perdida, la trama se desarrolla en 1936. Mientras la Alemania Nazi continúa expandiendo su reinado de terror, Adolf Hitler está inmerso en una búsqueda para encontrar el Arca de la Alianza, en la que se hallan guardados los diez mandamientos, cuyos poderes sobrenaturales, según una leyenda, pueden eliminar ejércitos en su totalidad.

El gobierno de los Estados Unidos quiere encontrar el Arca antes que Hitler y para ello decide enviar al Dr. Henry “Indiana” Jones. Éste es un profesor de arqueología, que acaba de regresar de una fallida expedición, cuyo objetivo era recuperar un ídolo sagrado de las junglas sudamericanas.

Indiana viaja a Patán (Nepal), donde se reencuentra con Marion Ravenwood, una hermosa y atrevida mujer que tiempo antes había sido su amante. Reticente a apoyarlo en un principio, ella decide unírsele para seguirle la pista a los nazis. Ambos viajan a El Cairo (Egipto) donde Marion se convierte en la aparente víctima de un atentado perpetrado contra Indiana.

Durante su persecución por los seguidores de Hitler, Jones se entera de que su enemigo René Belloq, un saqueador de tumbas francés, ha sido contratado por los nazis para guiar a éstos en la búsqueda del Arca. Peligrosamente, Indy logra infiltrarse en las excavaciones llevadas a cabo por las tropas nazis y descubre «el Pozo de las Almas», lugar en el que se ha mantenido históricamente oculta el Arca.

Crítica

La primera entrega de la afamada saga del arqueólogo Indiana Jones es sin duda la mejor de todas.

La trama, que se desarrolla de forma magistral, no deja que despeguemos la mirada de la pantalla.

La genial interpretación de Harrison Ford se une a la espectacular banda sonora del gran maestro John Williams. Ésta es, sin duda alguna, la culminación entre películas históricas y películas de ciencia-ficción.

Con uno de los repartos más aclamados de su época y también con el mejor director de su tiempo, Steven Spielberg, ésta ha sido  una de las mejores creaciones del aclamado George Lucas, también creador de Star Wars y Cazafantasmas.

El médico

Lucía Valls, 2ºESO B

EL MÉDICO

Basada en la novela de Noah Gordon.

Director: Philipp Stolzl

Guion: Philipp Stölzl, Noah Gordon (novela), Simon Block, Jan Berger y Christoph Müller.
Reparto: Tom Payne, Emma Rigby, Stellan Skargard y Ben Kingsley.

País: Alemania

Año: 2013

Género: Aventuras

Duración: 150 minutos

El médico

Escena de la película en la que Robert opera al Sha de apendicitis.

El amor y la medicina

Sinopsis

En la Inglaterra del siglo XI vive el joven Robert Cole, que desamparado por la muerte de su madre se convierte en el ayudante de un cirujano barbero, pero al sentir la muerte de cerca, decide embarcarse en un viaje a Oriente Medio para aprender medicina del médico más famoso de la época. Allí habrá de enfrentarse a multitud de adversarios y por sorpresa conocerá al amor de su vida, Rebecca. Tendrá que renunciar incluso a su religión para poder alcanzar su sueño.

Para los aventureros amantes de las historias de amor imposibles.

Muchos de los directores de hoy en día basan sus películas en novelas ya escritas, aunque no de  todas puede decirse lo mismo. Muchas supieron hacer honor al libro en el que estaban basadas, pero en cambio otras no tenían nada que ver con la historia original. “El médico” es una de las mejores que yo haya visto, aunque no haya leído el libro sé que la película se asemeja mucho a la historia de Noah Gordon. A mí la película me pareció increíble, pero es que el libro en su momento tuvo también una gran acogida y se convirtió en betseller.

Los paisajes, el decorado y la fotografía te transportarán al siglo XI.

El vestuario es igual o muy semejante al de la época.

El guión está muy bien argumentado y se utiliza un lenguaje culto propio del medievo.

La película es larga, y aunque transcurre de forma lenta, hay giros argumentales y cambios de escenarios que te atrapan.

Gran interpretación por parte de los actores y actrices. Me gusta sobre todo el papel que interpreta Emma Rigby, porque expresa muy bien el miedo y la inseguridad que siente el personaje de Rebecca a lo largo de la película.

Los efectos especiales son bastante creíbles, la sangre, los órganos, los cuerpos…

Muchas personas prefieren ver comedias absurdas que no enseñan nada. Todos  tenemos gustos distintos, pero si no se puede juzgar un libro por su portada, no se puede juzgar una película por su tráiler. Ésta en concreto nos da a conocer cómo se podían curar las enfermedades en el siglo XI, las diferencias y conflictos entre judíos y musulmanes y los imprevistos del amor, todo esto junto hará que nuestro protagonista tenga que superar gran cantidad de obstáculos y enfrentarse a grandes adversarios para tratar de alcanzar su sueño.

A todos los amantes de las películas  grotescas y sin sentido les digo que está bien ver alguna película de verdad, de vez en cuando. No tiene que ser necesariamente histórica o basada en un libro, puede ser de amor, aventuras, acción, comedia o drama.

Mi conclusión es que vale la pena ver esta película, la trama es muy interesante y apasionante, además, lo tiene todo, amor, pasión, drama y acción.

Os la recomiendo.

Memorias de una Geisha

Soraya Aracil, 2ºESO A

DIRECTOR: Rob Marshall

GUIÓN: Robin Swicord, Doug Wright

GÉNERO: Drama/Romance

DURACIÓN: 145 min.

FECHA DE ESTRENO: 29 de noviembre de 2005

MÚSICA: John Williams

REPARTO:      Ziyi Zhang (Chiyo/Sayuri)

Ken Watanable (Presidente)

Michelle Yeoh (Mahema)

Randall Duk Kim (Dr.Cangrejo)

Gong Li (Hatsumoto)

Memorias_de_una_geisha-997537506-large

“Creamos otro mundo secreto, un mundo de belleza”

Años previos a la Segunda Guerra Mundial, una niña japonesa de nueve años es vendida junto a  su hermana, por sus padres. Chiyo (Ziyi Zhang) es enviada a trabajar a una casa de geishas de Nitta Okiya; mientras que su hermana mayor no tiene tanta suerte y es enviada a un prostíbulo. Los comienzos de Chiyo son duros, en su camino se cruza  una rival traicionera que casi consigue quebrar su entereza, pero tras un encuentro con el que será el amor de su vida, todo cambiará y desde ese momento sólo deseará convertirse en una famosa geisha, que se iniciará en este arte con la amargura de preservar su amor en secreto.

Esta película está basada en la obra homónima de Arthur Golden, aunque todavía no he leído esta novela, y por lo tanto, no puedo juzgar su adaptación, lo cierto es que esta maravillosa película atrapa de lleno al espectador, es como si te hiciera entrar a través de los ojos de la protagonista hasta las entrañas de esta profesión que rinde culto a la feminidad, la belleza y el arte de la sofisticación.

El principio es un poco sombrío y opaco, ya que su infancia es la parte  más floja de la película, pero conforme la protagonista crece el interés aumenta y tienes una verdadera inclinación por su  misterioso final.

El diseño del vestuario y el maquillaje tienen un peso muy importante, todo en él es correcto, cuidado y elegante. La película goza de una imponente y visual fotografía, que se ve reforzada por la interpretación magistral de las protagonistas, todo en la película es increíblemente creíble, gracias al abundante don de interpretación de estas actrices.

Esta película ha conseguido impresionarme, inquietarme e incluso conmoverme, es asombroso y sorprendente como una película puede apoderarse de una persona, ha logrado que la gente comprendiera el verdadero significado de las geishas “obras de arte en movimiento”.

 Orgullo y prejuicio

Inés Mira, 2ºESO B

Dirección: Joe Wright.

Reparto: Keira Knightley, Matthew Macfadyen, Tom Hollander, Rosamund Pike, Jena Malone, Donald Sutherland, Brenda Blethyn, Judi Dench.

Año: 2005

Fecha de estreno: 10-02-2006

Duración: 129 min.

Género: Drama romántico.

Color o en B/N: Color.

Guión: Deborah Moggach.

Fotografía: Roman Osin.

Montaje: Paul Tothill.

Basada en la novela homónima: Orgullo y Prejuicio de Jane Austen.

Banda sonora: Dario Marianelli.

Esta clásica historia de amor y malentendidos tiene lugar en la Inglaterra de finales del siglo XVIII. Las cinco hermanas Bennet, Elizabeth (Keira Knightley), Jane (Rosamund Pike), Lydia (Jena Malone), Mary (Talulah Riley) y Kitty (Carey Mulligan), tienen una madre (Brenda Blethyn) cuya única fijación es encontrarles marido. Pero Elizabeth, inteligente y con carácter muy fuerte, quiere casarse por amor, y a este respecto cuenta con el apoyo incondicional de su padre (Donald Sutherland) y no así con el de su madre, que es una casamentera. Cuando el rico y soltero Sr. Bingley (Simon Woods) se instala en una mansión vecina, les cambia la suerte a su favor, ya que su principal prioridad era encontrar esposa. En el baile de bienvenida, Lizzie conoce al apuesto y elegante señor Darcy (Matthew Macfadyen), pero, su primera impresión no es muy buena, le parece demasiado orgulloso y arrogante.

Orgullo y Prejuicio

 

La película es genial, ya que han utilizado todos los factores necesarios para que te introduzcas en la vida y en las costumbres de esa época. Es una película que engancha desde el principio hasta el final.

Toda la película está contada con un exquisito vocabulario. Por otra parte, la banda sonora de Dario Marianelli es preciosa, muy pegadiza y destaca la música de piano, instrumento principal en el romanticismo y que sale a lo largo de la película. Y también, la fotografía de Roman Osin, que ofrece hermosos planos de la Inglaterra del S.XVIII. «Orgullo y prejuicio» se disfruta de principio a fin. El único defecto es que no tiene una segunda parte, y para los que nos gusta este género de películas te quedas con ganas de una continuación.

Interestelar 

Lucía Tárraga, 2ºESO A

AÑO: 2014

DURACIÓN: 169 MIN

PAÍS: ESTADOS UNIDOS

DIRECTOR: CHRISTOPHER NOLAN

GUIÓN: JONATHAN NOLAN, CHRISTOPHER NOLAN

MÚSICA: HANS ZIMMER

FOTOGRAFÍA: HOYTE VAN HOYTEMA

GÉNERO: CIENCIA FICCIÓN

Inspirada en la teoría del experto en relatividad Kip Stepehen Thorne sobre la existencia de los agujeros de gusano, y su función como canal para llevar a cabo los viajes en el tiempo. La historia gira en torno a un grupo de intrépidos exploradores que se adentran por uno de esos agujeros y viajan a través del mismo, encontrándose en otra dimensión. Un mundo desconocido se abre ante ellos y deberán luchar por mantenerse unidos si quieren volver de una pieza. La película cuenta con un reparto de lujo con nombres como Matthew McConaughey (‘Sahara’), Anne Hathaway (‘El caballero oscuro. La leyenda renace’), Jessica Chastain (‘La noche más oscura’) y Michael Caine (‘El caballero oscuro’), todos ellos a las órdenes de Christopher Nolan (‘Memento’, ‘Origen’).

Interestelar

¿La típica película?

El guión se empeña en dar explicaciones para que no nos perdamos en la película, cosa que creo que resulta contraproducente porque al final genera aburrimiento, ya que sabes cómo va a desenvolverse la trama desde el principio. A mí en cambio por mucho que intente dar explicaciones el guión, no he podido llegar a comprender del todo el porqué de ese viaje al espacio para salvar la raza humana, sin antes dejar claro, qué motivó la destrucción de la Tierra.

La música de Hans Zimmer no es lo que esperaba. La mezcla de sonido me ha sorprendido negativamente. El sonido durante las escenas más espectaculares hace que uno se sienta dentro de la película, pero en muchas escenas el diálogo se escuchaba demasiado bajo, e incluso a veces se ve eclipsado por la música. Hay momentos que simplemente es suficiente con escuchar el sonido del espacio, cosa que creo que el espectador agradecería.

La aventura está bien contada, aunque no me ha causado ni frío ni calor, cosa que creo que hay que tener en cuenta dada la naturaleza de lo que se están jugando: la existencia de la raza humana, y no despierta la suficiente intriga por descubrir el final, resulta un poco predecible. Creo que el desenlace es demasiado típico, me falta un cambio de rumbo en los últimos minutos que desvíe totalmente la trayectoria de la película.

Hay que admitir que los efectos especiales son muy buenos (las escenas en el espacio, junto a la magnífica iluminación son realmente espectaculares) pero ¿y qué más? Ya está, no cabe nada más que destacar y pienso que es algo alarmante, ya que con todo el marketing que ha tenido esta película, me faltó algo más, insisto, un cambio en el final. Un giro argumental que no hubiera relegado  a esta proyección a convertirse en la típica historia en el espacio que al final acaba solucionándose felizmente. Siento que la película es buena, pero con demasiadas imperfecciones que al final acaban oscureciéndola.

Yo le daría tres estrellas, no siento amor por esta película pero tampoco un desprecio.

Una gran película

Carla Valero, 2ºESO B

Película: La milla verde (1999)

Duración: 198 minutos

Género: Drama fantástico

Actores: Michael Clarke, Tom Hanks, David Morse, Doug Hutchinson

Director: Frank Darabont

La milla verde

Esta película cuenta la historia de John Coffey, un hombre de gran tamaño al que acusan de la violación y el asesinato de dos niñas. Es sentenciado a muerte así que lo envían a “la milla verde” para ser electrocutado. En el tiempo que está allí, Paul Edgecombre y otros funcionarios presencian extraños sucesos realizados por Coffey que los lleva a descubrir la verdad de  su  historia.

Qué decir de tan excelente trabajo. Esta película es simplemente perfecta. Una de las mejores que he visto y la única que realmente ha conseguido que me emocione. Está perfectamente ambientada y qué decir de los actores, que estaban completamente metidos en su papel. El toque fantástico es lo que hace que la película sea especial. Una vez más Frank Darabont ha demostrado su gran talento para el rodaje como ya lo hizo con “Pesadilla en el Elm Street”y posteriormente en “King Kong”.

Recomiendo ver esta película a todos los amantes del cine ya que esto es una película y lo demás son tonterías.

Yo soy Sam

Natalia Teruel, 2ºESO B

Dirección: Jessie Nelson

Producción: Jessie Nelson, Richard Solomon

Guion: Kristine Johnson

Fotografía: Elliot Davis

Montaje: Richard Chew

Protagonistas: Dakota Fanning, Sean Penn, Michelle Pfeiffer

País: Estados Unidos

Año: 2001

Género: Drama

Duración: 134 minutos

Música: John Powel

Sam (Sean Penn) es un hombre adulto que sufre discapacidad mental. Es abandonado por su mujer tras el nacimiento de su hija. Pero a pesar de todo eso, Sam trata a su hija con todo el cariño del mundo. Todo cambia cuando en el cumpleaños de Lucy, la asistenta social observa un desequilibrio en las emociones de Sam. Sam tiene una mentalidad comparable a la de un niño de 7 años. Las autoridades le quitan a su hija ya que piensan que no la podrá cuidar y educar, por eso, la darán en adopción. Sam decide buscar una abogada para que le ayude a recuperar a Lucy.

CONMOVEDOR Y TIERNO DRAMA

Yo soy Sam

Lo primero destacar las interpretaciones de Sean Penn, que bordó el papel de una persona discapacitada; por otra parte, Dakota Fanning, que pese a su corta edad, borda la interpretación.  Y Michelle Pfeiffer que interpreta a Rita, una abogada que se llegará a enamorar de Sam.

El trabajo con la cámara me parece de lo más reseñable, su movimiento crea tensión y angustia, e incluso podemos ponernos en la piel de Sam. La cámara unida a la fotografía, consigue crear un ambiente fantástico.

La banda sonora de esta película es una adaptación de ocho temas de los Beatles, y en continuas ocasiones podemos visualizar al grupo.

Tendremos en nuestro rostro una sonrisa continua por la personalidad de Sam y sus meteduras de pata, incluyendo a su grupo de amigos, también muy graciosos.

En resumen, es una película entrañable y muy bien interpretada y gracias a eso se ha convertido en una de mis películas preferidas.

Yo recomiendo verla, ya que os reiréis y os emocionaréis a partes iguales.

A todos los libros

A todos los libros,

Gracias por regalarnos las palabras precisas en el instante oportuno, por hacernos soñar, por descubrirnos puertas que nunca nos hubiéramos atrevido a cruzar solos, por enfrentarnos a nuestros temores y darnos el coraje y las claves para vencerlos, por esperarnos pacientemente y recibirnos siempre con la misma alegría, por complacernos y enseñarnos cada día una nueva lección, por acercarnos de lleno a la realidad y alejarnos de ella para madurar otra visión del mundo. Gracias por no dejarnos solos en nuestras noches en vela, por custodiar nuestra imaginación y seguir alimentándola sin descanso. Gracias por tus historias, porque a veces, o casi siempre, ellas son también las nuestras personales, y ese vínculo alcanza un poder indestructible. Gracias sencillamente por ser, por reivindicar con elegancia vuestro lugar, por confiarnos ciegamente y con enorme sencillez cuanto poseéis, que al fin y al cabo es lo más valioso que se le podría entregar a alguien, porque cuando una primera página se muestra en todo su esplendor ante nuestros ojos, un delicado hilo invisible nos habrá unido a ella para siempre. Gracias por tu amistad incondicional.

Hoy es vuestro día, y por ello os cedemos todo el protagonismo…

Libro de bolsillo

Me levanté, y allí estaba, encima de mi mesita de noche. Un libro, el típico libro gordo y no demasiado llamativo. Eran las 7:45 cuando me di cuenta que el libro me hablaba. No paraba de decirme una y otra vez que lo leyese. Cuando llegué al colegio, abrí la mochila, y allí estaba, y comiendo, cenando…Me seguía a todas partes. Dijo que si no lo leía desaparecería. Desde entonces me encanta leer.

Natalia Guillem, 1ºESO B

María y su amigo

Ésta que está tumbada es María y ese montón de hojas es el libro que ella sueña con publicar. Ellos llevan juntos desde que María tenía siete años, y desde entonces han ido creciendo poco a poco los dos juntos, hablando hasta tarde todas las noches. Y así seguirán hasta que María consiga su sueño, mostrárselo al mundo.

Nieves Casado, 1ºESO A

Una historia entre hojas

Estaba harto. Harto de haberme pasado parte de mi vida esperando ser escrito para ahora estar postrado en una estantería junto a mis hermanos, viendo como unos se iban pero luego volvían tras haber experimentado la satisfacción de servir al fin parael que estábamos hechos, la lectura. Me he pasado cada día viendo como unas manos cogían a mis compañeros y yo todavía seguía ahí, postrado en esa estantería. ¿Por qué yo? ¿No podría ser un libro de aventuras o para niños pequeños? Así que aquí sigo yo, en la estantería con una historia de hace millones de años que fue evolucionando, hasta que un día noté como alguien me cogía…

Vicky Bernabéu, 1ºESO B

El poder de la lectura

Esta es la historia de un niño que siempre estaba jugando a la consola, y sus notas cada vez iban a peor. Sus padres no sabían qué hacer para que dejase los videojuegos y se pusiera a estudiar.

Un día el niño y sus padres se fueron a la caseta de su abuelo, sin cobertura, sin internet, sin tele. El abuelo le dijo que escogiera su libro favorito, el niño dijo que no. Aguantó un día, dos, una semana. Desesperado empezó a leer, sus notas mejoraron, se convirtió en una persona nueva, renovada, porque había descubierto una bella afición.

 Mar Juan, 1ºESO A

Un libro feliz

Érase una vez un libro feliz. Pero no del todo, porque no tenía amigos, ya que siempre estaba metido en un cajón. Hasta que un día salió de éste, gracias a la ayuda de un niño. Al principio no sabía qué hacer, pero se le ocurrió buscar más y más amigos, y los encontró. Después de ese hecho, que cambió su vida, el libro fue feliz para siempre y nunca más volvería a estar solo.

Vicente Pardines, 1ºESO B

Almas gemelas

Había un libro que nadie compraba. Se encontraba en una estantería apartada donde sólo estaba él. Se sentía triste. Hasta que un día una niñita llamada Clara, que estaba enfadada, se encontró con este libro y lo compró para alegrarle el día. Cuando Clara se lo leyó, también él le alegró el día a ella. Ahora son grandes amigos.

Santi Millán, 1ºESO A

Roger, un libro aventurero

Érase una vez la historia de Roger, que era un libro con muchas aventuras, pero siempre estaba solo. Y un día, Ernesto empezó a leer a Roger. Él estaba feliz, porque no se divertía desde hacía mucho, mucho tiempo. Pasaron los días y Ernesto terminó el libro, después, Ernesto lo fue dejando a sus amigos Angelillo, Alfredillo, Willy… Por fin, Roger era feliz.

Sergi Juan, 1ºESO A

Un sueño no correspondido

Érase una vez un libro que soñaba con conocer mundo, viajar, quería comprobar y observar si de verdad existían los personajes de sus historias. Pero después de mucho tiempo, asumió que su deber era cultivar el conocimiento de los niños, le bastaba con saber que hay niños que aún leen sus historias, que se interesaban por los cuentecillos de hadas, princesa y trols. Le bastaba con eso.

Marta Sanchis, 1ºESO A

El país de Librolandia

Una vez en una biblioteca había un libro al que siempre despreciaban, nunca lo leían y siempre estaba tirado por el suelo. Él se sentía alejado del mundo, hasta que una niña lo recogió del suelo y se lo llevó a su casa . El libro le habló y le dijo: ¡Gracias!

La niña se asustó. Al día siguiente el libro le invitó a ir al país de librolandia y la niña dijo encantada: ¡Sí!. Viajaron los dos juntos a través del libro y …

Sara Sanchís, 1ºESO A

¿Sabes si existo?

Dicen que tan solo soy un libro, pero no soy un libro cualquiera. Dentro de mí hay una historia. Tengo varios recuerdos, son recuerdos que están grabados en mí. El recuerdo más bonito que tengo fue cuando los niños y las niñas me cogían con sus suaves y delicadas manos. Cuando todo el mundo leía mis historias. Pero hay que pasar página, hoy en día nadie sabe de mi existencia.

Llúcia Castelló, 1ºESO A

Category: Día del libro  Tags: , , ,  Comments off

El séptimo arte

“Un niño, un maestro, un lápiz y un libro pueden cambiar el mundo”.

¡Cuánta razón tenías Malala!

Después de leer bellas historias de amor y desamor, descubrir grandes verdades y sufrir algún que otro desengaño;  viajar hasta los lugares más estrafalarios que la imaginación creó, sentir en primera persona la adrenalina de una aventura apasionante, y experimentar en la propia piel el dolor ajeno. Después de conocer a personas que cambiaron su forma de ver el mundo y hallar en lo desconocido e incierto lo mejor de sí mismos; después de entender que en los libros se encuentran las mejores respuestas, los más sabios consejos y el más apacible refugio para la reflexión, despertó en su interior la necesidad imperiosa de expresarse.

Tomaron papel y lápiz, y así fue como comenzó todo. Hasta hoy,  fecha en la que yo, orgullosa y satisfecha, os presento en primicia el resultado de un gran y maravilloso trabajo, demostrando con ello que de las herramientas más sencillas pueden obtenerse los más óptimos resultados.

                        Sensibilidad

               Humanidad

               Comprensión

         Solidaridad

Respeto

 Alegría

       Tolerancia

Se combinan a la perfección en estos cortometrajes donde la EMPATÍA es el componente esencial y determinante.

Sin más preámbulos comienza esta gala del cine…

Sergi Juan, Elena Pastor, Marta Sanchís y Clara Sirvent, 1ºESO A

Álex Climent, Natalia Guillem y Pablo Rico, 1ºESO B

 Mónica Gosálbez, Lucía Quintana, Cristian Rus y Álvaro Suárez, 1ºESO 

Llúcia Castelló, Nacho Cintas, Sara Sanchís y Ainhoa Vera, 1ºESO A

Category: Cortometrajes  Tags: , , ,  Comments off

Historias

Cuántas veces hemos pasado por delante de ese letrero…Hubo días en los que lo observamos pormenorizadamente, mientras esperábamos a alguien, desde el coche parados ante aquel semáforo que nunca parece ponerse en verde, una tarde de domingo cuando paseábamos sin rumbo fijo…y así, de forma casual, reparamos en sus colores, que contrastaban con la sobriedad de sus letras, sonreímos ante el ingenioso juego de palabras, y sentimos cierta curiosidad por saber que se escondía tras aquellas siglas…Ajenos a la historia que se escondía tras su anodina apariencia. Él continúa ahí, y probablemente, si las cosas no cambian, seguirá estándolo, pétreo ante nuestra mirada y la de todos los viandantes que algún día lo observaron al pasar.

Como lo seguirá estando ese museo que visitamos de niños y al que, desafortunadamente, ya no hemos vuelto, aun a pesar de que aquella mañana nos pareció el lugar más fascinante de todo el universo.

Como cada tarde, si las circunstancias no lo impiden, regresará a nuestros oídos el sonido dulce y melódico del inconfundible piano de cola que, desde hace un año, le devolvió la juventud a nuestro edificio.

Como cada noche, nuestra luz se apagará antes que la de nuestra vecina, cuya sombra seguirá tejiendo y tejiendo hasta bien entrado el amanecer. Piezas únicas de un valor incalculable que algún día cubrirán de belleza otra piel.

Y como parte de esa rutina que hace grande la vida, con cada nuevo despertar los sueños y las esperanzas de millones de personas empezarán con ilusión el día. Algunos de esos designios, muchos quizá, no llegarán al ocaso; pero otros, muchos también, seguirán firmes a su propósito y aguardarán con paciencia y entusiasmo su momento, cuando al fin puedan convertirse en realidad.

Cada noche, cuando el sol se desvanezca definitivamente, infinitas historias como infinitas son las estrellas del cielo, descansarán en el interior de cada corazón, hasta que tal vez un día, nadie sabe ni cuándo, ni dónde, se conviertan en fuente de inspiración.

Ellos, pequeños-grandes periodistas, cogieron su cámara y tomaron el sendero que sólo están dispuestos a cruzar los auténticos aventureros, y por el impredecible trayecto esto fue lo que encontraron…

Porque nunca lo olviden amigos, aunque las paredes no hablen, algunos sueños no se hagan oír y los más altos muros custodien hermosos secretos, no hay historia que se le resista a estos buscadores de realidad. ¡Disfrútenlas!

Nacho Guerrero y Javir Latorre, 2ºESO A

Clara Rivas y Carla Valero, 2ºESO B

Lucía Brotons, Silvia Casanova y Lucía Montesinos, 2ºESO A

Aitana Palao y Lucía Valls, 2ºESO B

Laura Salvador y Lucía Tárraga, 2ºESO A

Inés Mira y Matilde Reig, 2ºESO B

Daniel Amorós y Luis García, 2ºESO B

José Martínez y Carlos Reche, 2ºESO B

Mis imprescindibles

Todos somos prescindibles. Sí, amigos y amigas, sé que suena triste, y que además ofrece una visión algo pesimista, o incluso derrotista, de la propia existencia humana. Si ninguno de nosotros somos imprescindibles, es que no somos necesarios, podríamos concluir, pero permítanme que les diga, por paradójico que pueda resultar, que esa deducción no anda en absoluto bien encaminada.

Desde bien pequeños nos enseñan a comprender la vida, mal que nos cueste aceptarlo, como un ciclo: nacemos, procuramos, presumiblemente, disfrutar de nuestra estancia terrenal en la medida de lo que podemos, y asumimos a regañadientes que un día, sin saber ni cómo, ni dónde, ni tal vez por qué nos marcharemos. Sin embargo, reducir a esta simplicidad esquemática la magnitud de una trayectoria tan inédita y especial como es la vida, podría resultar desalentador, pues bien sabemos que aunque al final nos habrá parecido tan corta como la expresión gráfica de dicho proceso, la realidad es que ésta es mucho, muchísimo más que una secuencia de tres pasos.

Cuando llegamos al mundo, ni siquiera tenemos conciencia de haberlo hecho. Y es curioso, porque sin la capacidad de poder pensar por nosotros mismos, sin haber recibido indicaciones previas, o algún que otro consejo, la simple razón de estar ahí, de ser persona, nos arrastra sin paliativos hasta la línea de partida para, sin más preámbulos, comenzar nuestra propia carrera.

Nuestro ritmo, en principio, será leve, sutil, delicado, pero la frecuencia irá subiendo de intensidad conforme avancemos; vendrán obstáculos que superaremos, otros que sencillamente esquivaremos con audacia, y otros que nos harán caer y casi desfallecer. Habrá lugar para el éxito y la satisfacción que a cambio deja todo esfuerzo. En ocasiones iremos más rápido y en otras desearemos hacerlo lento. Pero lo más importante es que no estaremos solos durante el recorrido, porque en él siempre encontraremos a quienes quieran trabajar en equipo, por lo que alcanzar la meta se nos planteará como el más vacuo de nuestros objetivos.

Todos somos prescindibles, sí, porque todos algún día dejaremos de ser en un sentido puramente físico, y la vida seguirá su curso incluso para las personas que tanto amamos y tanto nos amaron, pero lo cierto es que nuestro lugar será para aquellos que se queden irreemplazable. Y siempre habrá alguien que recordará el eco de nuestra risa, que bailará emocionado nuestra canción, que cerrará los ojos y aspirará fuerte al sentir cerca la esencia de nuestro perfume. Siempre habrá quien devuelva a la memoria colectiva algunas de nuestras anécdotas, y hará suyos los consejos que un día le dijimos. Y así será como si nunca nos hubiésemos ido.

Muchas serán las personas que pasarán por nuestra vida, y puesto que el ser humano fue dotado a mansalva de ese instinto tan primario llamado amor, podrá quererlas a todas ellas a la vez, aunque de distinta manera. Pero tal vez sólo un grupo reducido de ellas, quizá cinco, quizá algunas más, serán la última imagen que proyecte nuestra memoria antes de apagarse llevándose consigo nuestros recuerdos.

Carla Valero Cespedosa, 2ºESO B

A lo largo de mis 14 años de vida muchas personas han sido esenciales para mí y muchas de ellas aún lo siguen siendo, pero si tuviera que elegir, sin duda, me quedo con estas cinco maravillosas personas.

La primera y la más especial es mi madre. Ella es la mujer de mi vida, mi ejemplo a seguir, la que me guía cuando dudo con lo que tengo que hacer. Es una mujer fuerte, que nunca se rinde. También es muy soñadora, pero con los pies en la tierra, esto es algo que me repite siempre. Es la persona que pase lo que pase me va a apoyar y a querer incondicionalmente. A ella le debo la vida, aunque a veces no se lo demuestre.

Otro imprescindible es mi padre, mi superhéroe, mi hombre perfecto. La persona que junto a mi madre me ha educado, apoyado y querido siempre. A él también le debo la vida. Es un hombre muy valiente y luchador, que si algo quiere va a por ello hasta el final, es algo que admiro mucho de él.

Mi abuela, creo que no tengo palabras para describirla. Simplemente todo se resume en que es la mejor. Mi cocinera favorita, el otro amor de mi vida. La mujer más fuerte que puede haber, ha luchado y lucha por todos nosotros cada día. Aún no encuentro las palabras para describirla y para agradecerle todo lo que ha hecho y lo que hace por todos nosotros. Ojalá fuera eterna, porque el día que me falte una parte de mí se apagará para siempre.

Otra persona imprescindible es mi tía, pero yo diría que es mi hermana. Desde que era muy pequeñita ha estado junto a mí, apoyándome, dándome la mano cada vez que caía y aún lo sigue haciendo. A ella le debo mucho.

Y el último, pero no por ello menos importante, es él, el que ha cambiado una parte de mí: Albert Espinosa, un escritor que con sus libros me ha ayudado mucho y gracias a él mi forma de ver el mundo ha cambiado. Y me ha enseñado que por muy desgraciado que te sientas siempre hay motivos para sonreír y que las cosas, a veces, sí pueden ser para siempre.

Y con esta carta, les doy las gracias por todo.

 Lucía Montesinos Medina, 2ºESO A

Muchas personas dicen que tienen muchos amigos, que todo el mundo les quiere, pero la verdad es que, desde mi punto de vista, las verdaderas que siempre están a tu lado se pueden contar con los dedos de la mano.

Hay muchas personas que a lo largo de mi vida se han ganado toda mi confianza, y otras la han perdido, pero la verdad es que sólo cinco personas son las que sé que nunca me dejarán caer, que siempre van a estar ahí para mí, que son imprescindibles.

De alguna forma son como los dedos de mi mano, me completan. También me ayudan a hacer la mayoría de las cosas, me hacen todo más fácil y le van dando ritmo y energía a mi propia historia.

Mi madre es un pilar muy importante en mi vida y me da el amor más grande de todos. No sé lo que haría sin ella, sin todo su apoyo, sin todos los consejos que me da cada día y, sobre todo, sin sus abrazos.

También está mi padre, que es como mi perro guía, siempre me enseña el buen camino. Supongo que de alguna forma, gracias a él soy como soy. Me asombra que le haga enfadar todos los días y que, sin embrago, siempre encuentre la forma de perdonarme y seguir dándome su cariño.

Aunque no se lo diga muy a menudo mi hermano también es muy imprescindible para mí. Durante este largo tiempo que no he estado con él, he llegado a echar de menos incluso nuestras peleas, porque cuando mis padres no están la casa se siente muy vacía y necesito a alguien que me de consejos cuando los necesito porque no es lo mismo hablar por videollamada.

Por otra parte está mi tío que siempre está ahí. No le hace falta preguntar qué me pasa, él siempre lo sabe y me saca el tema de la cabeza con alguna de sus tonterías o de sus historias.

Finalmente está mi mejor amiga, mi hermana, Aitana. Siempre sabe sacarme una sonrisa y sabe escuchar todos mis problemas y también ponerles solución. Constantemente nos peleamos y muchas veces he llegado a pensar que se iría de mi lado, pero siempre me sorprende y se queda.

No sé de qué manera podría agradecerles a todas estas personas lo mucho que han hecho por mí, y creo que nunca la encontraré. Así que de alguna forma espero que con brindarles todo mi amor sea suficiente.

Aitana Palao Peydró, 2ºESO B

Cuando leí el tema de esta redacción por mi cabeza circularon muchos nombres. ¿Cómo elegir cinco? ¿Cómo escoger, si las personas imprescindibles en mi vida son incluso más de diez? Tengo tres personas claras: mi padre, mi madre y mi hermano, pero, ¿y las personas que han estado siempre ahí? ¿Y mis abuelos? Supongo que entre los cuatro tendría que elegir a dos. ¡Esto es tan difícil!

Empezaré por mi abuela Antonia, porque siempre recordaré las tardes de parchís en su casa, cómo sonreía al ver que me ilusionaba cuando iba a ganar; por enseñarme a amar a mi familia por encima de todo y hacerme ver que nunca me sentiría sola. Por pasarme dinero a escondidas para que mi madre no nos regañara, por decirme que era su nieta favorita, para después decírselo a Marc, Paula y a Víctor. Porque aunque te hayas ido, sólo lo has hecho físicamente, porque cada vez que vea una película de cowboys o de Hitchcock me acordaré de ti. Porque cada vez que alguien cante una canción de Raffaella Carrà, me vendrá una imagen tuya a la cabeza. Porque en las comidas familiares siempre serás el gran tema de conversación. Porque cuando veo la foto que hay en casa siempre sonrío… Me has dado valores muy importantes, pero sobre todo, me has dado felicidad. Muchas gracias por haberme aguantado y haber hecho de mi paso por tu vida algo muy divertido.

Otra persona a la que le debo mucho es a mi abuela Carmen. Ella siempre me ha cuidado, siempre me ha mimado, y siempre me ha querido. Supongo que como ella es la abuela más joven que tengo, es quizá, con la que más tiempo he pasado. Las noches de películas, las comidas familiares, las visitas inesperadas, y otras con sorpresa. Las meriendas viendo “Puente Viejo”, las otras recordando al abuelo, los días interminables escuchándome practicar piano, y otros haciendo experimentos en la cocina. Ella me ha enseñado a respetar sin condiciones, a valorar lo que tenemos, a sacar moraleja de todas las historias que me contaba del abuelo… Ha demostrado ser una persona paciente, bondadosa, amable… Y por eso aún tengo cosas que aprender de ella. Es principal en mi vida, sin ella, estaría perdida.

Ahora, como no, mi madre. Mi madre, mi niñera, mi profesora, mi cocinera, mi taxista, mi psicóloga, mi estilista, mi peluquera, mi consejera, mi hombro sobre el que llorar, la sonrisa que me apoya… Hay veces que no te lo demuestro, creo que muy pocas veces se lo he dicho, pero sólo puedo decirle gracias, por todo y por mucho más. La verdad, no sé que más escribir, supongo que lo que siento no se puede expresar con palabras, ni incluso con hechos. Tengo fe ciega en ella, en sus brazos encuentro siempre un referente, mi guía.

Mi padre, el pilar que sostiene el techo de mi desastrosa vida. Sin él sería como una brújula que perdióel rumbo. Él me ha enseñado a valerme por mí misma, aunque sé que él, en el fondo, no quiere que crezca. Es imprescindible para mí, como supongo, que todo padre lo es en la vida de un niño. Muchas gracias por todo, de verdad, gracias.

Y por último, pero no menos importante, mi hermano, mi compañero de vida, mi compinche, mi confidente… Sé que a veces me paso con él, pero supongo que le ataco para defenderme a mí, para crearme un escudo. Lo siento, de verdad, a veces no eres consciente del daño que haces hasta que te lo hacen. Supongo que como es más pequeño lo veo vulnerable, pero me ha enseñado mucho, más de lo que nunca podría imaginar. No me había dado cuenta de que puede que él me haya enseñado más a mí que yo a él.

Así que gracias. A todos. Por todo.

Nacho Guerrero Ferrer, 2ºESO A

Pensar en sólo cinco personas que sean imprescindibles en mi vida es una decisión muy difícil, porque yo elegiría a toda mi familia, a  mis amigos y también a mi ídolo Iker Casillas. Pero reflexionando en mi interior, la primera elegida, sin dudarlo, sería mi madre, porque la quiero mucho y  me ayuda siempre con mis problemas, con los deberes, etc; también contribuye a que mi día a día sea mejor. Además ella fue quien me concedió el regalo más bonito y que nunca me cansaré de agradecerle: la vida.

Después elegiría a mi padre. Él es muy importante para mí y también me ha dado el regalo de la vida. A los dos nos gusta hacer largas caminatas por la montaña, en las que a veces nos acompaña mi madre, también salir a correr y ver el futbol, sobre todo cuando juega España pues disfrutamos animando a la selección.

Mi hermano, aunque a veces nos pelemos, pero lo cierto es que siempre que estoy con él me lo paso muy bien y me divierto mucho, juntos hemos pasado muy buenos momentos y seguro que nos quedan muchos más por vivir.

Los dos últimos son mis amigos Pablo García y Edu porque siempre hemos estado juntos, nos lo hemos pasado  muy bien y hemos vivido momentos que nunca olvidaré. También, como tenemos en común la misma afición: el fútbol, cuando no sabemos qué hacer jugamos a este deporte y nos lo pasamos genial.

Podría haber elegido a otros, pero he pensado en estas cinco personas porque son muy importantes para mí y, sin duda, lo seguirán siendo.

Irene Picó Samper, 2ºESO B

 A lo largo de mi vida le he cogido cariño a muchas personas y para mí se han convertido en mis imprescindibles. Ellos son: mi madre, mi padre, mi hermano y mis abuelos. Mi madre es una de las personas más importantes en mi vida porque aunque a veces no la quiera ni ver, sé que en el fondo no podría vivir sin ella, muchas veces no me comprende, pero curiosamente, siempre me acaba dando los mejores consejos. También mi padre es muy importante en mi vida, porque aunque no lo vea tanto o no hable tanto con él, siempre está dispuesto a ayudarme y a apoyarme en todo lo que haga falta, aunque él no esté convencido del todo o no le guste mucho.

Otros súper imprescindibles son mis abuelos. Mi abuela Irene, que de ahí me viene el nombre, vive en frente de mi casa y la veo todos los días. Ella siempre está dispuesta a ayudarme, dentro de lo que puede; y luego está mi abuelo, siempre que voy a verlo me cuenta cosas de todo lo que hace y revive conmigo muchas anécdotas de cuándo era pequeño.

De niña me encantaba estar con ellos porque me entretenía mucho, aunque ahora, como es normal, ya no juego con ellos. Son un gran apoyo para mí y no sé qué haré cuando no estén. Por suerte tengo a todos los abuelos, pero son tantos años cogiéndoles cariño que cuando pienso en que algún día ya no no estarán conmigo y ya no veré a mi abuela todas las mañanas venir de comprar el pan, me costará mucho superar su pérdida, aunque es ley de vida, pero son demasiado importantes para mí.

Por supuesto, fundamental es mi hermano Rubén, que aunque ya no juego con él como cuando éramos pequeños lo quiero mucho y aún nos echamos algunas risas de vez en cuando. Para mí es un gran apoyo porque se preocupa mucho por todo lo que me sucede, aunque a veces yo no lo vea, o no lo quiera ver, enseguida que me ve preocupada intenta hacerme reír y si me ve triste me anima, desde que pasé a secundaría ya casi no nos vemos, y cuando nos vemos, siempre estamos peleándonos, aun así es muy, muy importante en mi vida, y sé que sin él, no voy a decir que no podría vivir, porque todo se supera, pero me quedaría siempre un hueco en el corazón que nadie podría llenar.

Lucía Tárraga Romero, 2ºESO A

Es difícil saber quién nos aporta algo, quién nos enseña, quién nos abre la puerta cuando la vemos cerrada ante nuestros ojos. Evidentemente yo sé perfectamente las personas que me enseñan, me apoyan y me ayudan día a día. Ellos son mis padres, quienes siempre han estado ahí, me han enseñado, regañando, abrazado. Pero ahora, en esta etapa de mi vida, es todo diferente. Ahora mi mayor apoyo son mis amigas y una de ellas en especial. Siempre he tenido relación con ella, con el tiempo nos fuimos distanciando, y ahora me doy cuenta de que aunque estuviera un poco lejos de mí siempre estaba. Ella no me regala los oídos, siempre me dice la verdad, pero ante todo me apoya.

Luego, por otra parte, está mi hermano. Es más pequeño que yo, pero es una persona muy importante en mi vida. Sin él no sería quien soy. Y sí, vale, yo soy mayor que él, pero me ha enseñado cosas que ni yo misma sabía. Desde pequeña he estado siempre con él, ha sido la pieza que completa mi puzzle, porque hasta que no llegó estaba incompleto.

Por supuesto, en mi lista también está mi padre, desde pequeña me ha apoyado, siempre ha sido mi ejemplo a seguir, siempre ha sido el típico padre que nunca te castiga, pero es que con él nunca me he portado mal; sí, he tenido algunos roces, pero el mero hecho de que entendiera mis errores y siempre los corrigiera con cariño y me concediera una segunda oportunidad, eso es algo que siempre valoré de él.

¿Y ahora qué? ¿Quién más es importante en esta prueba llamada vida? ¿Quién es la persona que valoró el esfuerzo que hice desde pequeña? ¿Quién más sabrá por lo que he tenido que pasar y lo fuerte que tuve que ser, que soy y que tendré que ser? Bueno pues esa persona es mi tío. El ya no se encuentra entre nosotros, se fue cuando yo tenía 10 años. Y hasta el día que me dejó no supe valorar lo importante que era en mi vida. Él me apoyó y me dejó una pequeña misión (por llamarlo de alguna manera) esa misión fue que fuera feliz, que disfrutara de todo momento, que aprovechara cada día porque cada nueva mañana nos regala un día más de vida, y tú decides si quieres que éste sea maravilloso o no.

Y ahora falta esa última y gran persona que es mi otra gran pieza de mi inmenso puzzle que al final poco a poco se va completando y encajando. Me faltan muchos imprescindibles, si tuviera que hacer una lista me he dado cuenta de lo larga e inmensa que sería. Bueno pues poco a poco me he dado cuenta de quién ha creado la persona que soy. Esa persona, aunque parezca raro, soy yo, yo he ido observando, escuchando y dándome cuenta de cómo es el mundo de ahora, de cómo es la sociedad y de cómo es el trayecto de mi camino. Soy afortunada por tener lo que tengo, por tener la capacidad de saber y aprender un poco más cada día. Me he dado cuenta de que tengo tantos, tantos imprescindibles, que al final yo soy la semilla del gran árbol que, progresivamente, voy creando, mi vida, mi destino, mi misión, mi rompecabezas. Me he dado cuenta de que todos mis imprescindibles, tenían algo en común, ellos eran parte de mí.

 Laura Azorín Rico, 2ºESO A

Las personas más imprescindibles de mi vida son muchas, pero de éstas he escogido a cinco en concreto: la primera es mi madre. Ella es inteligente, atenta, se preocupa mucho por nosotros y para mí es la mejor madre del mundo; me entiende en muchos sentidos y suele ser la que más me apoya.

En segundo lugar está mi padre, él es más frío, pero también se preocupa mucho por mí, siempre intenta hacernos felices a todos.

En tercer lugar está mi abuela, ella es muy cariñosa y dulce, siempre intenta tenernos a todos contentos y también nos ayuda a todos en lo que puede.

En cuarto lugar está mi abuelo, él ya no está entre nosotros pero nunca le olvidaremos, nos quería mucho al igual que nosotros a él, siempre nos defendía y con él nos lo pasábamos muy bien. ¡Era un abuelo 10!

En quinto y último lugar está mi tía, ella siempre quiere lo mejor para mí, aunque yo, a veces, no lo valore y nos enfademos por ello, pero ella siempre sabe perdonar y nuestros enfados duran muy poco.

Éstas son las personas más imprescindibles de mi vida, aunque no los únicos, hay muchas personas más, tanto amigos como familiares a los que también quiero mucho y también son muy importantes para mí.

 Laura Salvador Sanjuán, 2ºESO A

En mi vida han aparecido muchas personas esenciales, pero a lo largo de todo este tiempo he descubierto quiénes son “mis imprescindibles”. Podría hablar de todas mis amigas y también de todos mis familiares, pero en esta ocasión sólo lo haré de aquellos que de verdad me han marcado y apoyado.

La primera de todas sin dudarlo es mi hermana María. Ella es mi icono, mi ejemplo a seguir. Aunque nos peleemos siempre terminamos arreglándolo. Desde pequeña mis ganas por parecerme a ella fueron infinitas. Ella fue quien me enseñó a jugar al baloncesto y quien me impulsó a apuntarme.

Mis otras personas imprescindibles, claramente son mis padres, quienes siempre están ahí, tanto en las buenas como en las malas. Últimamente la situación con ellos no es igual que cuando era pequeña, ya que yo he crecido y ellos piensan que sigo siendo la niña pequeña que hay que tratar con guantes de seda, eso me enfada y hace que discutamos por cualquier tontería. Pero igualmente yo les quiero mucho y aunque no se lo demuestre siempre, sigo pensando que ellos son mis héroes.

Otra persona imprescindible para mí es mi abuela Isabel, la madre de mi padre, que por desgracia  últimamente no se encuentra muy bien. Sé que ella es muy fuerte y puede contra todo, pero tengo miedo a perderla. Sólo con mirarla a los ojos se me llena la mente de recuerdos y pienso que mi vida no sería igual sin ella a mi lado. La quiero mucho, y aunque de pequeña no la visitaba con demasiada frecuencia, ahora siempre que puedo voy y así aparte de verla sonreír, también recabo más recuerdos que de mayor me harán reír a mí. 

Mi última persona no es la menos importante, sólo que es con la que menos tiempo he vivido. Esta persona es mi primo Álvaro, que tiene ahora tres años. Con él siempre estoy feliz. Estos años a su lado han sido maravillosos, ya que no había tenido ningún primo hermano, niño y pequeño. Siempre que va a casa de mi abuela quiere que este con él y que juegue con él a los coches o a saltar en la cama. Cada día que lo veo una sonrisa se dibuja en mi cara y pienso que ojalá cuando se haga mayor, siga siendo el  niño con el que nunca me enfado y siempre esté bien.

Soraya Aracil Seco, 2ºESO A

Momentos, la vida está hecha de momentos, para los cuales necesitamos a las personas idóneas y poder entonces aguardar esos pequeños recuerdos. Sólo somos una raza avanzada de primates, donde tarde o temprano estos recuerdos serán olvidados, pero mientras esta vida llega a su fin puedes cerrar los ojos y dejar que todos estos hechos fluyan.

Cerraba los ojos y su imagen flotaba junto a mí, mi abuelo, con aquella mirada misteriosa a la vez que intrigante. Su imagen parecía real, pues un día lo fue. Esta persona fue esencial en mi vida. Los instantes que pasé junto a él vivirían en mí eternamente y nunca podré olvidarlos. Esta persona tan extrovertida me hizo ver el mundo de otra manera, con cadencias y giros que me parecían una danza única, sublime e inigualable.

Todo comenzaba a cobrar vida y, ahí estaba, mi abuela. Ella inundaba de bellos colores mis días en un mundo de penumbras y soledad. Era la única que, con una sola mirada, sabía todo aquello que me pasaba, la única que creía en mí cuando otros no lo hacían.

La joven Jane Austen, esta persona que decidió vivir de su pluma, a Jane no le importaba la casta y ésta se hubiera casada con alguna persona inferior a su rango si en ese compromiso hubiera existido el amor. Esta persona me ha transmitido firmeza y seguridad, por querer vivir de lo que tanto amaba y no dejarse influir por nadie.

Mi madre por ser una persona risueña, que me ha hecho creer que hasta lo que parece imposible se puede superar si uno lo desea con mucha fuerza. Su ayuda es un sentimiento noble y honesto en un mundo de indiferencia y dolor, por su bondad y todos sus logros que son dignos de elogio.

Emma Watson, una modelo a seguir. Te hace sentir fuerte y poderosa por haber nacido mujer. Esta mujer, como embajadora de Buena Voluntad de la ONU Mujeres, ha hecho creer que el feminismo no es, lejos de lo que algunos pudieran creer, una corriente caduca, cuyo objetivo es ningunear al género masculino. Para ella el feminismo es la doctrina social que anima a las mujeres a luchar por tener los mismos derechos que los hombres, estar todos -con independencia de nuestro género- en igualdad de condiciones. Emma te hace creer que merece la pena seguir a tu corazón y tener principios.

¡No somos la generación perdida!

Estos jóvenes, aunque pueda parecerles extraño dada su corta edad, pues la mayoría no superan los trece, tienen, sin embargo, un arduo cometido por delante; un firme objetivo que ellos mismos se autoimpusieron y que están dispuestos a cumplir cueste lo que cueste, pues tenacidad no les falta.  Tal vez por ello, han querido unánimemente que esto que hoy os muestro como mera intermediaria, sea el primer paso para demostrar que están trabajando en ello y que, desde luego, el estado latente de un pronóstico por el momento poco alentador, no les parece motivo siquiera suficiente para perder la esperanza.

Son jóvenes, sí, pero precisamente por esta razón poseen en su plenitud los sentimientos que a veces, al hacernos mayores, se nos olvidan, o simplemente los fuimos aplacando con el tiempo por pura resignación. Un error que terminamos pagando caro, pues sin quererlo o sin saberlo, aceptamos vivir bajo la temible losa de las injusticias, que tanto pesa y consume. ¡Pero no teman!, pues no está todo perdido, las nuevas generaciones -a las que no les sirve de consuelo, y mucho menos de ayuda- que las emplacen bajo la maltrecha definición de “perdida”, son, y estoy convencida de ello, el mejor garante para ejemplificar que las cosas, en el sentido genérico y más ambicioso de la palabra, pueden cambiar si uno de verdad se lo propone.

more »

Querido yo…

Cuando era niña disfrutaba de los días sin más, no reparaba más allá de los primeros segundos desconcertantes al despertar, en saber si era lunes o sábado, pues para mí todos tenían algo especial. Recuerdo que siempre me levantaba con una sonrisa y rara vez, salvo en ocasiones extremadamente puntuales, me sentía triste. Nada me acongojaba y me ponía el mundo por montera cada dos por tres.

Me sobraban horas de sueño, pues muchas veces las desestimaba por considerarlas tiempo perdido, yo prefería jugar, reír con mis amigos, pasear junto a mis padres, cantar mis canciones favoritas y fantasear con los sueños que algún día, lejano, podría cumplir.

Cuando era niña vivía la vida sin preocuparme en cómo sería ella conmigo, simplemente la aceptaba como el regalo que altruistamente me había sido concedido, y tal vez por ello, fui inmensamente feliz. Y es posible que ahí esté la clave, el día en que empecé a preguntarme por la vida en términos que sólo un adulto debería barajar, ese día, todo empezó a ser diferente.

Sí, tomé una conciencia mayor o tal vez más realista de mi propia existencia, pero durante mucho tiempo me desistí a creer que esa nueva madurez pudiera destrozar su esencia y mucho menos el amor incondicional que yo sentía por ella, así que luché por preservar esa pequeña parte de mi yo interior que se resistía a crecer para seguir nutriéndome de su fuente natural de optimismo.

Sin nada más que una ligera idea de lo que era la vida, me lancé de bruces sobre ella dispuesta a abrazarla, a quererla a pesar de sus defectos, a perdonarla por sus errores, a aprender con ella y a escucharla más, para no juzgarla antes de lo debido. Ella a veces fue fría, casi distante, me rompió el corazón con sus desprecios, dándome la espalda en el momento más insospechado; fue cruel, mezquina hasta lo inimaginable, pero aun en el peor de mis recuerdos con ella, hay fotogramas, borrosas secuencias que aún hoy circulan por mi mente en una danza maravillosa. Esas imágenes me acompañan allá donde voy y son muchas veces el engranaje que guía mis pasos.

Aun así, mentiría si dijera que en más de una ocasión no me hubiera gustado resguárdame al amparo de esa inocente y despreocupada concepción de la vida que todos tuvimos alguna vez, pero hubiera sido cobarde no aceptar que la vida nos reta para hacernos más fuertes, aunque esto, a veces, sea difícil de creer. Cada embestida, cada golpe, cada caída, nos hace caer en el desaliento, pero es nuestra fe en ella, en nuestra vida, la que nos da el golpecito que necesitamos para seguir adelante.

Cada uno de nosotros somos héroes de nuestra propia batalla, pero la realidad es que a veces nosotros somos nuestro peor enemigo. Renunciamos a oportunidades por creernos incapaces ante ellas; somos feroces e incisivos críticos con algunas facetas de nuestra personalidad, sin ser conscientes de que son esas cualidades las que nos hacen diferentes y únicos. Nos infravaloramos y ocultamos con recelo la parte de ese yo que reservamos para cuando estamos solos, haciendo únicamente visible a los demás, los resquicios del otro yo que intentamos en balde que nos represente por completo.

Todos necesitamos ser aceptados, contar con la aprobación de aquellos a quienes queremos y nutrirnos de su fuente inagotable de cariño. Necesitamos imperiosamente que nos quieran, sentirnos queridos y amar sin límites, para no lamentar el día en que no lo hicimos. Es la naturaleza más pura de nuestro instinto, y sin ella difícilmente podríamos encontrar sentido a nada.

La vida sólo nos da una oportunidad para ser quienes queramos ser. Por eso viaja, ama, conversa con tu interior, aléjate de lo que no te representa y busca en el fondo de tu corazón, a solas y en silencio, todas las respuestas. Y por primera vez, te habrás encontrado a ti mismo. Tú en plenitud, formando un maravilloso juego de luces y sombras.

Cartas de los alumnos a sí mismos…

Como he puesto en la parte delantera de esta peculiar carta, espero estar leyendo esto en unos quince años, aproximadamente. El problema es que no sé siquiera sí podré atreverme a abrir este papel lleno de estúpidas reflexiones de adolescente algún día.

Esta no va a ser la típica carta de: espero haber cumplido mis metas, mis sueños, estar dedicándome a lo que quiero, porque ahora mismo no tengo claro ni lo que quiero cenar, cómo voy a saber algo que cuestiona mi vida a un mayor nivel.

A mis aburridos y cortos trece años, he aprendido que nadie se muestra como realmente es. Todo el mundo tiene una máscara que se coloca cuando se siente vulnerable, un disfraz, una apariencia, un “otro yo”. Así que nunca sabes si estás hablando con la persona en realidad o sólo con la parte de él o de ella que quiere mostrar.

Yo, o nosotras, no sé… (Esto es tan raro que ni siquiera sé como dirigirme a mí misma.), no me acuerdo cuándo empecé a construirlo, pero sé, que de momento el muro que esconde mis más sinceros y profundos sentimientos sigue siendo impenetrable; aunque por dentro me muero por que alguien logre traspasarlo y conocerme como realmente soy.

Espero que a mis veintiocho años de edad, (que es cuando supongo estaré leyendo este montón de palabras sin sentido) alguien lo haya conseguido, sino, creo que explotaré.

La gente dice que la adolescencia es una etapa para vivir el momento, exprimirlo al máximo, pasarlo bien. Yo no sé los demás, pero para mí, no es tan fácil como lo pintan. Tras mi máscara se esconden lágrimas de inseguridad, tristeza… Pequeñas gotas de cristal escondidas tras el muro, y que nadie sabe de su existencia. Esas diminutas, aunque abundantes lágrimas, se acumulan tras la barrera, y al final, terminará por desbordarse.

Muchas veces siento que debo soltarme, mostrarme como soy, pero no puedo, sencillamente me es imposible. El mero hecho de no ser aceptada me aterra. Pero espero haber afrontado este temor cuando esté leyendo esta carta. Y sino, tengo un mensaje urgente para mí misma:

“Tienes que mostrarte como realmente eres, ser tú misa, porque de lo contrario, la gente de tu alrededor querrá la idea que tienen de ti, y no a ti en estado puro. Porque la parte de detrás del muro se hará pequeña y pequeña, hasta acabar por ser inexistente. Y como Paulo Coelho explicó en su hermoso relato: “Mi otro yo”, si acabas con ese “otro yo” acabas con tu esencia, tu alma, contigo misma. Sólo tienes que dejarte llevar por tu verdadero yo, y encontrarás a las personas que te quieran de verdad.

Aitana Palao Peydró, 2ºESO B

¡Querido Octavio!, últimamente te veo feliz y alegre, sé que no sabes que te observo, y ambos sabemos que eso no es exactamente lo que sientes, sino lo que les haces ver a tus familiares y amigos, por miedo a que piensen que eres débil o inferior. También sé que te sientes en ocasiones frustrado y enfadado y que por dentro tienes ganas de gritar de rabia, por las injusticias que pasan a menudo, no lo expresas en público ni tampoco dejas que esas injusticias te desmoralicen, sé que sigues adelante e intentas erradicarlas con tu empeño.

Te sientes estresado y agobiado en ocasiones, y a raíz de eso a veces muestras mal genio y te enfadas mucho con tus seres queridos sin motivo, sé que lo haces sin darte cuenta, pero para eso te estoy escribiendo, para darte consejo y decirte que pase lo que pase, siempre tendrás a esas personas que quieres y amas a tu disposición para todo lo que necesites, por eso debes cuidarlas. No te sientas avergonzado ni oprimido por tus propios sentimientos, sólo deja que salgan, porque de vez en cuando, viene muy bien soltarlos y decir lo que piensas. Y cuando estés estresado por algo, sea lo que sea, no olvides hacer otras cosas para relajarte. Sólo quiero que siempre que puedas mires el lado positivo de las cosas, y que, sobre todo, no olvides aprovechar los pequeños instantes que te da la vida.

Con mucho amor: Tu otro yo.

Octavio Ferrero Miró, 2ºESO B

Querida Clara,

Te escribo esta carta porque, al fin y al cabo, soy la persona que mejor te conoce. Y la que mejor te puede ayudar. Esta carta es para ti, por lo tanto sólo tú vas a entenderlo todo a la perfección.

Escribo esto para desahogarme, para que sepas que estoy aquí y seré la única que lo esté siempre.

Cierro los ojos y nos veo en la cuna, tan pequeñas, tan indefensas e inocentes frente a la vida en sí. Recuerdo cuando no llegábamos al estante donde estaba nuestro juguete preferido y nos poníamos a llorar ya que no podíamos alcanzarlo y requeríamos de la ayuda de mamá o de papá, eso era lo que menos nos gustaba, en verdad siempre fuimos muy independientes, a veces demasiado. También recuerdo cuando jugando nos caíamos y nos hacíamos un pelado en la rodilla, como llorábamos, como si se acabara el mundo. Era irónico ya que el nuestro no había hecho más que empezar.

Éramos indefensas, pero qué seguras nos sentíamos cuando mamá nos hacía la guarida secreta, creo que nunca nos sentiremos tan seguras como lo estuvimos en sus brazos. O cuando papá nos decía «Te quiero pequeña», esas tres palabras eran necesarias, eran como una pequeña dosis de energía extra que recibía nuestro corazón.

Dicen que siempre hemos sido muy curiosas, ahora aún lo somos, pero menos. Creo que con los años se va perdiendo parte de esa frescura inicial, esa curiosidad insaciable por saberlo todo. Eso es algo que deberíamos apuntar en la lista de «Cosas a mejorar», pero no de cambiar;toda nuestra vida hemos oído el `tienes que cambiar esto o tienes que cambiar lo otro´, no me gusta esa expresión. Nunca nos ha gustado. No se trata de cambiar, las personas no cambiamos, mejoramos. Vamos progresando con los años. Así deberíamos de pensar todos. Pero bueno, me voy del tema, estoy aquí para hablar de nosotras. Aún no te lo he dicho, pero me gustaría que supieras que te quiero, que quiero que te quieras y quiero que nos queramos siempre, porque si nosotras no nos queremos ¿quién nos va a querer?

Esta carta es para ayudarte, pero hasta que no me he puesto a escribirla no me he dado cuenta de que también me ayuda a mí. Y mucho. Ha sido como una terapia de psicología, pero sin salir de casa. ¡Ah! Hablando de psicología, es nuestro sueño desde hace ya bastante tiempo. Convertirnos en una gran psicóloga, poder ayudar a la gente con sus problemas. Espero que lo hagamos bien. Pero para conseguirlo tenemos que estar ahora centradas, pues nos estamos acercando a la meta final.

Ahora mismo estamos pasando por una mala racha, nuestra adolescencia. Estamos enfadadas con el mundo la mayor parte del tiempo, sobre todo con mamá, esto es algo que tenemos que añadir a la lista de «Cosas a mejorar». Estamos confusas, ya que lo que ayer nos gustaba hoy lo odiamos, o al revés. No sabemos bien lo que queremos hacer con todo en general. A veces somos demasiado impulsivas para hacer las cosas, no pensamos. Bueno, por no hablar del carácter, es lo primero que tenemos que mejorar. Sobre todo con mamá, que es la que nos aguanta las veinticuatro horas del día y con la que más broncas tenemos, porque si no nos deja hacer algo nos enfadamos, damos cuatro gritos, algún que otro portazo y ya está. Como si así solucionáramos algo, ¡qué ingenuas somos a veces! Pero también tiene mucho que ver con la edad, es algo «normal» ahora. Cuando no nos dejan hacer algo, comprarnos algo o incluso hacernos algo en el pelo, creemos que somos unas incomprendidas, a veces tenemos razón, pero no siempre. Los adultos no nos entienden en la mayor parte de las cosas que nos gustan o que nos queremos hacer y es algo que no entiendo. Total, el pelo crece, ¿la ropa? Ya se pasará la moda, o ya nos cansaremos de esa prenda. Esto tendría que venir de serie, nosotros tendríamos que tener un manual para entender a los padres y ellos uno para entender a los hijos. Sería todo más fácil. Algún día podríamos inventarlo ¿no crees?

Quiero que nos queramos por encima de todo, porque esta época es muy dura y con los cambios tenemos las hormonas revolucionadas y un día nos vemos estupendas y otro no nos queremos ni un poquito (otra cosa que hay que mejorar).

Que nos tenemos que rodear de buena gente y apartar la energía negativa de nuestra vida. Todo lo que nos quite la sonrisa que se vaya por donde ha venido y muy lejos a ser posible, porque nos merecemos ser felices y punto.

Tenemos que tener presente que si algún día nos sentimos bajas de moral, deberemos hacer un esfuerzo por estar arriba, pero que al igual que estamos en lo alto también podemos bajar. Eso es algo a lo que nos tenemos que acostumbrar, pero que sea de las pocas cosas a las que hay que acostumbrase, no tenemos que darles el placer a otros de ser conformistas. Tenemos que ir siempre a mejorar en todos los aspectos: en el baloncesto, en los estudios, en nuestros sueños, en nuestras opiniones y en cualquier cosa que nos pase en la vida. No nos podemos permitir que la lista se quede vacía, por lo menos tiene que tener dos o tres cosas susceptibles de mejora. Nos tenemos que levantar cada día pensando que ese día va a ser el mejor de todos y que nos van a pasar un montón de cosas maravillosas. Siempre con una sonrisa en la cara, porque estar tristes no merece la pena. Tenemos que pensar que pueden ocurrir cosas geniales y que si no lo vivimos al máximo, es un día que perderemos de nuestro paso por el mundo.

Tenemos que confiar mucho en nosotras, querernos muchísimo y cada vez que nos miremos a algún espejo vernos bonitas, porque lo somos.

Y nada pequeña, creo que está todo dicho. Esta carta la vamos a guardar como nuestro pequeño pero valioso tesoro. Y cada vez que nos sintamos mal, tristes o con poca autoestima quiero que leamos esta carta y que nos demos cuenta de que somos estupendas. Incluso con todo lo bueno y lo no tan bueno que nos forma como persona.

Te quiero mucho y quiero que tu también te quieras muchísimo. Que todo lo que hagamos sea de corazón y porque queremos. Que nos tomemos la vida de forma positiva, y procuremos que nuestro paso por la Tierra haya sido realmente único y maravilloso. Y, sobre todo, que nunca dejemos de ser nuestro yo en plenitud.

Cariñosamente, tu yo.

 Clara Valero Cespedosa, 2ºESO B

Querido yo de dentro de diez años.

Durante estos últimos años te he estado observando.

No olvides nunca ser tú misma, con tus virtudes y tus defectos, no dejes que nadie te manipule, sé libre, no tengas vergüenza de mostrar al mundo cómo eres en realidad y, sobre todo, diviértete, aunque eso suponga algunas veces no seguir las normas.

Aprendiste de los errores cometidos antaño y procuraste hacer lo que tú creíste correcto.

Recuerda que no has de llorar por personas que no se merecen tus lágrimas, confía en personas que demostraron ser verdaderos amigos y procura tener siempre cerca a tu familia, por muchos disgustos y peleas sin sentido, que puedas tener.

No abandones tus esperanzas, persigue tus sueños y no te rindas nunca. Aprovecha cada segundo, cada instante para vivir la vida, ya que la etapa más bonita de nuestra vida se acabó y ahora empezamos una nueva, mirando hacia el futuro sí, pero siempre viviendo el presente. Lo mejor o lo peor quizá esté por llegar, pero las dos sabemos que hay algo en lo inesperado que nos intriga.

No olvides nunca el lema de “Vive y deja vivir”.

Elige tu destino y escoge quién serás en un futuro. Y recuerda, jamás olvides quién eres.

Lucía Valls Hernández, 2ºESO B

Querida Lidiana,

Hacía tiempo que no sabía nada de ti, hasta que empecé a recordar mi pasado, y ahí es donde estás tú, en cada lado. Recuerdo muchas cosas y en todas estás, a veces me gustaría no recordar cosas que dejaron marca, que siguen atemorizándome, me gustaría que todo fuese tan fácil como parece, pero por desgracia nada lo es. Te escribo para decirte que no sigas así, como mi yo del pasado, camina, avanza y piensa más en tu futuro, ya que gracias a él podrás disfrutar de cosas geniales, momentos inolvidables con personas que serán importantes en tu vida y que, seguramente, estarán siempre a tu lado, gustándoles estar contigo a pesar de todo.

Lidiana Martínez Pérez, 2ºESO A

 

Hola Carlos,

Últimamente te veo muy contento, supongo que será porque has conseguido tu sueño de tener una mujer, dos hijos, y un trabajo que te hace feliz y te permite tener los fines de semana libres para disfrutar de tu familia. Yo sigo igual que la última vez que te escribí, aún me acuerdo que antes solía hacerlo muy a menudo: por tu cumpleaños, en cualquier otra celebración, un día sin más, porque necesitaba contarte cómo me sentía.

El otro día me acordé que tenía que decirte que buscaras en casa de papá y mamá, en nuestro antiguo cuarto, aquel libro de hojas sueltas que escribí durante el 2015 en el que figuran todos los buenos momentos con los amigos y la familia, pero también los malos momentos. Te sugiero que lo leas para que la nostalgia te haga revivir en tu mente bellos recuerdos. Está encima de la mesita de noche.

Sabes, me llena de curiosidad la respuesta que tú tienes a la pregunta que yo hoy me hago: ¿Qué fue de Camilo y Valentina, mis periquitos? Bueno, si te digo la verdad, prefiero que no me lo cuentes y que el propio destino sí lo haga por ti.

También me gustaría saber cómo están mis profesores de secundaria, ya que me quedan dos años en el colegio, y no sé si los volveré a ver algún día…

Espero que tú ya hayas visto la saga de “Harry Potter” ya que yo no, y la de “Indiana Jones” también…

Po cierto, al final ¿Hiciste bachillerato o hiciste algún módulo? ¡Estoy muy nervioso, necesito saber eso!

Siempre he soñado con tener mascotas ¿También lo has conseguido? Si es que sí, ¿Cuál? Si es que no, ¿Por qué? Espero que tengas periquitos, un perrito y una gata. Ojalá que sea así.

Bueno me tengo que despedir.

Espero tu respuesta,

¡Adiós!

Carlos Asensio Alal, 2ºESO A

 

 

EL OTRO YO 

Mario Benedetti

Se trataba de un muchacho corriente: en los pantalones se le formaban rodilleras, leía historietas, hacía ruido cuando comía, se metía los dedos a la nariz, roncaba en la siesta, se llamaba Armando Corriente en todo menos en una cosa: tenía Otro Yo.

El Otro Yo usaba cierta poesía en la mirada, se enamoraba de las actrices, mentía cautelosamente, se emocionaba en los atardeceres. Al muchacho le preocupaba mucho su Otro Yo y le hacía sentirse incómodo frente a sus amigos. Por otra parte el Otro Yo era melancólico, y debido a ello, Armando no podía ser tan vulgar como era su deseo.

Una tarde Armando llegó cansado del trabajo, se quitó los zapatos, movió lentamente los dedos de los pies y encendió la radio. En la radio estaba Mozart, pero el muchacho se durmió. Cuando despertó el Otro Yo lloraba con desconsuelo. En el primer momento, el muchacho no supo qué hacer, pero después se rehizo e insultó concienzudamente al Otro Yo. Este no dijo nada, pero a la mañana siguiente se había quitado la vida.

Al principio la muerte del Otro Yo fue un rudo golpe para el pobre Armando, pero enseguida pensó que ahora sí podría ser enteramente vulgar. Ese pensamiento lo reconfortó.

Sólo llevaba cinco días de luto, cuando salió a la calle con el propósito de lucir su nueva y completa vulgaridad. Desde lejos vio que se acercaban sus amigos. Eso le llenó de felicidad e inmediatamente estalló en risotadas. Sin embargo, cuando pasaron junto a él, ellos no notaron su presencia. Para peor de males, el muchacho alcanzó a escuchar que comentaban: “Pobre Armando. Y pensar que parecía tan fuerte y saludable”.

El muchacho no tuvo más remedio que dejar de reír y, al mismo tiempo, sintió a la altura del esternón un ahogo que se parecía bastante a la nostalgia. Pero no pudo sentir auténtica melancolía, porque toda la melancolía se la había llevado el Otro Yo.

BREVE REFLEXIÓN:

El pobre Armando pasó buena parte de su vida intentando conciliar y limar asperezas entre dos personalidades radicalmente opuestas. Una de ellas siempre intentaba por todos los medios imponerse y alzarse victoriosa frente a la otra; y Armando, aunque erróneamente, terminaba declinando la balanza en favor de la más fuerte, tratando de evitar con ello más quebraderos de cabeza.

Esta postura no era justa, pero todo podría haber quedado ahí, de no ser porque esa lucha la lidiaba Armando en su propio interior. Su yo rudo, implacable, tosco y osado se empeñaba en derrotar, aniquilar y destruir por entero a su yo sensible, profundo e inseguro, quien entonces lloraba desolado al sentirse arrinconado, perdido y desesperadamente solo.

A Armando, por mucho que le costase reconocerlo, –y de hecho nunca lo haría-, esta situación le incomodaba y no le hacía en absoluto feliz. Quería a sus dos yo por igual, cada uno –por separado- le aportaba cosas únicas y especiales, y aunque en ocasiones recelase de algunas de sus cualidades, o incluso las llegara a aborrecer o a menospreciar, sabía que sin ellas nunca hubiera sido Armando; y Armando era una persona con sueños, con luces y sombras, con ganas de encontrar su lugar, de amar y ser amado, de desmelenarse y dejarse llevar, guardándose la seriedad para las cosas importantes.

Armando se enfrentó, como muchos otros antes, al mayor enigma del ser humano: saber cómo era en realidad, y cuando lo resolvió, rehusó la respuesta, ¿y por qué? tal vez por miedo a no gustar, a ser rechazado, a decepcionar a aquellos en los que él había confiado las más altas expectativas. Y, cómo no, se equivocó, porque desde entonces dejó de ser Armando para ser una vulgar parodia de sí mismo, una mitad sin vida arrojada al inescrutable juicio de los demás, un yo ahogado en su propia búsqueda que se quedó huérfano de espíritu, de esencia.

Armando desestimó de él esa parte que le hacía diferente frente a los demás, y eso marcó su final. Armando no se escuchó, ni se habló a sí mismo con sinceridad, aplacó el grito sofocante de su voz, que se fue haciendo cada vez más inaudible; Armando trabajó arduamente en la creación de otra persona, la que le hubiera gustado ser pero no fue, y tal fue el esfuerzo depositado en dicha obra, que se olvidó de volar libre siendo simplemente él.

La de Armando fue una historia triste, de esas que dejan un sabor amargo, pero quizá de no ser así su lección no nos hubiera afectado tan profundamente. Sólo tenemos una oportunidad para mostrarnos al mundo como realmente somos, sin miedo, sin perjuicios, disfrutando del mero hecho de vivir, para que llegado el ocaso de nuestra existencia sólo nos quede paz, y la satisfacción de haber hecho lo que sentimos de todo corazón.

 

Category: Carta a mí mismo  Tags: , , ,  Comments off

Constitución por la PAZ

Reunidos todos los integrantes de 1ºESO en la Sala Primera donde se toman las grandes decisiones, acordamos por unanimidad la aprobación y posterior entrada en vigor del texto que a continuación les presentamos.

Esta Constitución, que será vinculante para todos los ciudadanos de la Tierra, es el mejor exponente de lo que deseamos: La consecución de un mundo más justo, ecuánime y libre, en el que los principios de la solidaridad, el respeto y la fraternidad sean valores incuestionables en el corazón de cada ser humano.

Todas las personas, sin excepción, deberán conocer los derechos y deberes aquí recogidos y hacerlos suyos, contribuyendo así a que la paz sea una realidad constatable; la mejor herencia para las generaciones del futuro y el más codiciado regalo para los que hoy suscribimos este acuerdo inédito.

Esta Carta Magna está fundamentada en tres pilares clave: empatía, tolerancia y amor. Es por ello que todos los padres de la misma, los que decidimos sumar nuestra voz a la causa común, estamos convencidos de que su publicación, prevista para el 30 de enero de 2016, será decisiva para que el progreso llegue, y empecemos a caminar por una nueva sociedad en la que no exista el miedo, ni el rencor, tan sólo la confianza en que podemos ser enteramente felices.

Desde el momento de su vigencia, la mentada Constitución de 2016 anulará la validez de aquellos preceptos anteriores que pudieran atentar contra su carácter eminentemente comprometido, equilibrado e íntegro, por considerarlos contrarios a la esencia de su personalidad. De este modo, nuestra nueva Constitución se reserva la potestad para eliminar la inquina, el dolor, la frustración y la soberbia de todos cuantos las alberguen, para cederles en su lugar aquellos sentimientos que les serán de gran utilidad para su bienestar y el de todos los que les rodeen.

Sin más preámbulos, procedemos a su exposición.

Firmado, 1ºESO.

DERECHOS Y DEBERES FUNDAMENTALES:

Artículo 1. Todas las personas tenemos derecho a expresar lícitamente nuestros sentimientos y opiniones en libertad, sin temor a ser juzgados por ello.

Artículo 2. Todos los ciudadanos tenemos el deber de valernos sólo de la palabra como la única solución posible.

Artículo 3. Todas las personas tendrán garantizado el derecho a la alimentación. Y juntos contribuiremos a la erradicación del hambre.

Artículo 4. Los ciudadanos deberán comprometerse con el uso de las energías renovables, en detrimento de las fuentes agotables.

Artículo 5. Todos tenemos el deber moral de no contaminar, promover activamente el reciclaje y cuidar del planeta.

Artículo 6. Todos debemos trabajar en el refuerzo y el enaltecimiento de la empatía, juzgar menos y vivir más.

Artículo 7. Todas las personas tendremos el inconmensurable privilegio de poder elegir nuestro camino, siempre que nuestra senda no interfiera indebidamente en la de los demás.

Artículo 8. Todos debemos preservar parte de nuestra inocencia infantil para seguir creyendo que existe la magia, y no perder nunca la esperanza.

Artículo 9. Todos debemos confiar en el perdón como el antídoto contra el odio y la maldad.

Artículo 10. Todas las personas harán del amor el motor de sus vidas.

Artículo 11. Todas las personas asumiremos el compromiso moral de cuidar y proteger nuestra flora y fauna.

Artículo 12. Todos tenemos derecho a manifestar nuestra opinión en cosas importantes para que ésta pueda ser escuchada.

Artículo 13. Tenemos el deber de respetar a los demás y lo de los demás.

Artículo 14. Todos denunciaremos públicamente cualquier acto que denigre la integridad de las personas tanto física como moralmente.

Artículo 15. Todos tenemos el deber de ser honrados y bondadosos, humildes y justos.

Artículo 16. Todos los niños tendrán garantizado el derecho a ser niños y, por lo tanto, vivir intensamente su infancia.

Artículo 17. Todos los niños tendrán derecho a ir a la escuela y recibir una formación que les prepare para la vida, haciéndoles autosuficientes, competentes y, sobre todo, personas de buen corazón.

Artículo 18. Todos tenemos derecho a predicar con los valores y principios de una religión, y a practicarla libremente sin perjuicio de otras manifestaciones distintas a la nuestra.

Artículo 19. Todos tenemos derecho a desarrollar, cultivar y alimentar nuestra propia creatividad con ánimo de llenar el mundo de cosas bellas.

Artículo 20. Todos debemos respetar y valorar nuestras diferencias como atributos que nos hacen únicos y especiales.

 Artículo 21. Todos debemos comprometernos a no perjudicar conscientemente, con hábitos nada saludables, nuestra salud y la de quienes nos rodean, pues es lo más valioso que tenemos.

Artículo 22. Todos tenemos derecho a ser felices.

Artículo 23. Todos tenemos derecho a encontrar el amor, amar sin condiciones y ser amados de igual modo.

Artículo 24. Todos tenemos el deber de apreciar lo que tenemos y no pedir nada más allá de lo necesario.

Artículo 25. Todos tenemos el deber de prohibir las armas y evitar las guerras.

Artículo 26. Toda persona deberá ser fiel a sí misma, a sus sueños, metas y convicciones. Seguir las directrices que marque su corazón en el uso lícito de su libertad.

Artículo 27. Todos tenemos derecho a la PAZ.