Booktubers para animar a la lectura

¡Hola! Hoy nuestros ingeniosos, elocuentes y creativos alumnos/as de 3ºESO nos presentan, a través de estos vídeos dinámicos e ilustrativos, las obras que han leído durante el tiempo de confinamiento.

Deseamos que os gusten y os lancéis, como ellos/as, a la aventura y el placer de la lectura.

Blaca Pérez:

Claudia Juan:

Clara Valls:

Cristina Berenguer, Marina Brotons, Alicia Reche y María Valero:

Natalia de Juan:

Carla Torralba:

Rosa López y Mar Mira:

Héctor Carbonell:

David Vilaplana:

Carla Bach, Paula Cruz, Natalia León e Irene Villar:

Despedimos el Día del LIBRO con un taller de escritura creativa…

Los libros son transmisores de las más inefables sensaciones, como las que os despertarán los relatos de estos jóvenes escritores…

WENDY

Por Rosa Nieves López Rozas

No pensé que lo haría nunca, pero aquella noche, bajo la mágica luz de la luna, me atrevía sentarme frente a aquella enigmática mujer, la cual empezaría a leer las líneas de mi mano…

Se llamaba Wendy, aquella mujer lo sabía todo acerca de mí, solo tenía que
dejarle mis manos impolutas y suaves. Estaba desesperado, me convertí e
n un desconocido para mí mismo, ni siquiera yo me conocía al cien por cien.

La luna brillaba con una claridad tan potente que parecía un foco, me puse
nervioso, empecé a sudar y me mareé. Me desperté al lado de una chica joven, estaba seguro de que no la había visto en mi vida, tal mujer no se me hubiera olvidado jamás. Me encontraba además en un piso que no reconocía, ni siquiera reconocía las dos voces agudas que me llamaban y me decían: “¡Despierta papá, hoy es el gran día!”.

No entendía nada, aquella hermosa dama me miraba con sus bonitos ojos
color café, estaba contenta y feliz, su mirada irradiaba ilusión. Las dos
pequeñas criaturas que me decían papá, se subieron a la cama y empezaron a saltar y a gritar, ¡seguía sin entender nada!

Una de las criaturas encendió la televisión para ver la retransmisión en vivo de “La pitonisa Wendy”, ese nombre me sonaba tanto… E intentando hacer memoria, Wendy me llamó: “Axel, no estás durmiendo, esto no es un sueño, estás en otra dimensión con la familia perfecta que siempre quisiste tener, aprovéchala y no pierdas ni un segundo más de tu vida cuestionando tu existencia”, de pronto la televisión se apagó.

Yo necesitaba volver a mi vida anterior, estar con mi verdadera familia en mi auténtica casa. Y comprendí que a veces pedimos cosas para intentar llegar a ser felices y perfectos, pero te descuidas y ya no hay vuelta atrás. No fui feliz cuando debí de haberlo sido y tuve oportunidad de serlo.

Jamás volví a escuchar de esa tal Wendy y jamás volví a escuchar mi
verdadero nombre, Axel quedó en el olvido para siempre.

¿QUÉ HARÍAS SI TUVIERAS QUE IRTE A VIVIR A OTRO PAÍS ?

Por Claudia Juan Beneyto

Pensando una historia convincente para esta redacción, se me ha ocurrido esta pregunta, pues es cierto, ¿ Qué haríamos ? me he planteado esta en varias ocasiones de la vida, pues no sabría qué responder y ni siquiera cómo reaccionar. Finalmente acabaría afrontándolo, y quién sabe, pues a veces hay que encontrarse con uno mismo y también conocer nuevas costumbres, pero nunca abandonando el lugar al que siempre regresarás y serás bienvenido.

Nuevas personas, lugares, manjares, experiencias, amistades, costumbres… una nueva vida totalmente diferente a la otra rutina que llevabas antes de marchar de tu ciudad hacia un nuevo país. Quizás sean experiencias, que nunca mejor dicho, te cambien la vida y te hagan abrir la mente de forma positiva, y que te hagan no querer volver a la ciudad donde has pasado la mitad de tu vida.

Echaría tanto de menos todo lo que me dejaría aquí, a mi gran grupo de amigas que no hay día que no esté con ellas, a mi familia que tanto quiero, por supuesto a mis profesores de mi querido colegio, a todas las grandes personas que conozco de mi pueblo, a los lugares de aquí, a la muy buena comida de mi madre, la rutina que hago diariamente aquí… pienso que es una decisión muy complicada y a la vez arriesgada de realizar, pues admiro a todo aquel que lo hace y deja todo lo que quiere en la otra parte del mundo con tal de poder conocer y crear una nueva vida mejor. En estos
instantes sería incapaz de realizar una experiencia como ésta, porque como se está en casa, no hay ningún sitio mejor, pero lo más importante de estas situaciones, es que allá donde estés te sientas querido y feliz, por eso decido compartir esta frase tan cierta de Elvira Sastre, “Para mí, cualquier lugar es mi casa, si eres tú quien me abre la puerta”

¿Amor eterno?

Por Elisabeth Carrasco Mariel

Seguramente las personas nos preguntamos que si el amor es eterno y dura para siempre, ¿por qué a veces se acaba? tal vez es que nos vendieron mal el cuento…

Desde mi punto de vista, hay varias clases de amores:

Cuando eres adolescente, el amor lo vives intensamente, al cien por cien, crees que todo es perfecto, como en un cuento de hadas y permites muchas cosas, conforme pasa el tiempo te vas dando cuenta de que no es así y de lo que realmente quieres y lo que no, de que el amor es imperfecto, como las personas.

Cuando ya eres más adulto, eliges el amor según tus gustos e ideales, teniendo más claro lo quieres, aunque a veces ese amor no es el correcto, porque las personas cambiamos por las situaciones de la vida y muchas veces la vida nos pone a prueba con miles de obstáculos  que nos afecta a todo, incluso al amor.

Y luego está el amor verdadero, pero que a veces no es eterno, en el cual dos personas se complementan aunque tengan diferencias menores.

Otro amor, es el de los amigos, que siempre viene bien, porque te comprenden y vives muchas situaciones con ellos, pero este amor también va por etapas y a lo largo de tu vida pasa mucha gente que consideras que es tu amiga y con el tiempo te vas dando cuenta que no es así, solo permanecen unos pocos, aunque de cada uno aprendes algo nuevo y diferente, a veces positivo y a veces no tanto… Pero de todo se aprende.

Yo creo que sí existe el amor eterno, que además es incondicional, infinito, absoluto y es el que menos valoramos, porque siempre está, sin pedir nada a cambio, ese es, el de la familia que pase lo que pase, o sea como sea siempre te apoya y está a tu lado.

Por eso valórala, cuídala y consérvala.

LA PUERTA

Por Marina Brotons Calatayud

Por fin estaba ante esa misteriosa puerta que tantas veces me había robado el sueño, hoy al fin descubriría la verdad. Tras varios años viviendo con la nueva familia de mi padre, al fin podría averiguar qué secretos escondía mí vil madrastra en aquella habitación.

Todo comenzó tras el divorcio de mis padres. Yo estaba destrozada, mí madre se había marchado a Inglaterra con sus padres. Mientras mí padre y yo nos mudamos a nuestra antigua casa, ya que era más pequeña y no podíamos permitirnos mucho más. Yo pensaba que mí padre y yo estaríamos más unidos que nunca y así fue hasta que Paloma llegó a nuestras vidas. Esta conoció a mí padre en un café y le ofreció un puesto de trabajo en su empresa. 

Con el transcurso de los meses acabaron enamorándose y decidieron que lo mejor sería que viviéramos juntos. A mi no me gustaba nada esta idea, yo veía en Paloma algo oscuro de lo que al parecer mí padre no se percataba. Intenté con todas mis fuerzas convencerlo, pero mis esfuerzos no dieron resultado y en menos de una semana ya nos habíamos instalado en aquella gran mansión a las afueras de la ciudad. 

Paloma no tenía hijas, por lo que yo estaba la mayor parte del día sola mientras ella y mí padre trabajaban en su empresa. Esto no me desagradaba, más bien era algo que me gustaba, así podía pasar todo el día investigando los rincones de aquella misteriosa casa. Un día decidí entrar en la habitación de Paloma, el único lugar de la mansión al que tenía prohibido ir. Aproveché que mí padre y mi madrastra tenían que hacer un viaje de negocios e iban a estar todo el fin de semana fuera. Al entrar, me llamó la atención una vieja puerta de madera desgastada. Me dirigí hacia ella para abrirla pero, para mi sorpresa, estaba cerrada con llave. Comencé a buscarla por toda la habitación sin éxito, pero no me rendí y al día siguiente conseguí encontrarla. Estaba detrás de un cuadro que había sobre el cabecero de la cama. Al fin había llegado el momento con el que tantas veces había soñado y abrí la puerta. Al otro lado encontré un escritorio. Me senté en la silla y comencé a revisar los cajones, jamás imaginé lo que encontraría. En su habitación secreta mí madrastra escondía documentos y contratos que demostraban que en su empresa se llevaban acabo montones de acciones ilegales. Pero, entre todos esos papeles me llamó la atención una carpeta en concreto. Cuando la abrí descubrí una foto de mí padre además de papeles describiendo con todo detalle algo terrible… su asesinato. Rápidamente cogí todos los papeles y corrí a mí habitación. Esperé hasta el día siguiente a que mis padres volvieran a casa, temiendo por la seguridad de mí padre.

Cuando llegaron corrí hasta la puerta y la alegría invadió mí cuerpo al ver que mi padre estaba sano y salvo. Le dije que quería hablar con él en privado, así que fuimos a mí habitación. Allí le enseñé todo lo que había descubierto y decidimos actuar. Llevamos todas las pruebas a comisaría y allí se encargaron del resto. Al final arrestaron a Paloma tras su juicio y mí padre y yo volvimos a nuestra pequeña casa. Por fin todo volvió a ser como antes.

¿Destino o casualidad?

Por María Guillem Galera

Todo empezó una mañana de verano, cuando por casualidad se encontraron Alberto y Ana en la proa de aquel barco, con rumbo a Grecia. Alberto era un famoso escritor que se dirigía hacia Santorini por motivos de trabajo y Ana formaba parte del servicio de la embarcación, se miraron y algo extraño sucedió entre ellos sin conocerse de nada, fue un flechazo a primera vista. Durante su estancia en el crucero se fueron viendo y conociendo un poco mejor, sentían que eran el uno para el otro, fue algo increíble. Todas las noches cuando ella acaba su turno de trabajo, se encontraban en la cafetería del buque y pasaban largas horas juntos hablando, riendo… parecía que el tiempo se parara, los dos eran felices cuando estaban juntos, pero el destino de ambos hizo que se separaran y no se volvieran a ver. 

Cada uno de ellos hizo su vida por separado, él se casó con una estupenda mujer con la cual compartía profesión y tuvieron dos hijas y, por otro lado, ella también encontró una pareja con la que era feliz y tenían un hijo en común. Ambos formaron sus familias y estaban felizmente casados. 

No sé si fue el destino o la casualidad, lo que hizo que se reunieran de nuevo, viviendo un encuentro inolvidable, poniendo en crisis sus valores y creencias sobre el amor. 

Su encuentro se produjo en Barcelona, los dos paseaban por las ramblas cuando de repente a Ana se le cayó el móvil al suelo, ambos fueron a cogerlo y cuando se vieron no podían hablar, se quedaron sin palabras, fue algo especial al mismo tiempo que extraño. Tras varias horas de conversar sobre sus vidas volvió a surgir la misma conexión que se originó hace diez años, es como si el tiempo no hubiera pasado, el destino los volvió a reencontrar. 

Pero esta vez no era tan sencillo, ambos tenían sus vidas montadas, tenían una familia a la que querían y les era muy duro sacrificar todo eso por estar juntos, aunque realmente es lo que deseaban. Hace muchos años el destino los separó y por otra parte no estaban dispuestos a volver hacerlo, ya que había sido como un milagro el volverse a encontrar. Les surgieron miles de preguntas como: ¿Se puede amar a más de una persona a la vez?, ¿todo esto es cosa del destino o tan solo una pura casualidad?…

Una noche quedaron en un hotel de la ciudad, y allí es donde se dieron cuenta de que su amor sería para siempre, que no podían vivir el uno sin el otro, aunque tuvieron que renunciar a sus parejas, creyeron más en el destino o la casualidad que los volvió a unir. 

Un gran sueño

Por Cristina Berenguer Pina

Otro día más, como todos los días me levanté, almorcé y cuando me miré al espejo… era más mayor, como si de repente tuviera 25 años. Empecé a llamar a mi madre y nadie contestó, hasta que llamaron al teléfono. Lo cogí y me habló un supuesto Álvaro. Yo estaba muy confundida y él me dijo que bajase. Que llegaríamos tarde. ¿Tarde a dónde?

 Al principio, yo no paraba de preguntarle quién era, pero hice lo que me dijo y fui a donde me dirigió, al parecer sabía más sobre mi vida que “yo misma”. Me propuso que abriera un armario enorme y cuando lo abrí todo estaba lleno de ropa, empecé a observar quién lo había diseñado, me fijé bien y en las etiquetas ponía mi nombre, ¿eso quiere decir que están diseñadas por mí?

 Bajé y estaba el chico esperando, era muy guapo (no vamos a mentir), no tardé mucho en descubrir que era mi novio. Enseguida subí al coche y cuando estábamos de camino no paraba de preguntarme si estaba nerviosa ya que le parecía estar con mucha tranquilidad debido a que íbamos a presentar mi nueva colección. Yo estaba flipando, no me lo creía, yo Cristina Berenguer el día anterior era una chica de 15 años con mucho que estudiar y al día siguiente estaba viviendo el sueño de mi vida.

Cuando llegamos había muchos paparazis haciéndome fotos a mí y al chico que estaba conmigo y además a muchos famosos más. Entre directamente a donde se estaban vistiendo las modelos, estaban ya preparadas y estaban guapísimas. Desfilaron todas y cuando me tocaba salir a saludar todo el mundo aplaudía un montón, yo no me lo creía era super feliz.

Cuando acabó el desfile había una pequeña fiesta, estaba toda mi familia, amigos, famosos y las modelos, todo el mundo me dio la enhorabuena por la colección tan bonita que había hecho.

La fiesta acabó tarde, Álvaro y yo nos fuimos a mi casa. Al día siguiente fui al taller donde ya empecé la siguiente temporada, mi taller y tienda estaba enfrente de la Torre Eiffel. Después me fui con mis amigas a hacernos un café y a merendar, después a seguir trabajando.

Toda esta aventura duró un mes, un día me levanté en mi cama y estaba mi madre, y mi hermana cuando fui a almorzar. Me dio mucha pena que se acabara esa experiencia, rara pero bonita, me di cuenta de que todavía me queda mucho por trabajar, pero eso era lo que me hace feliz y estaba segura de que lo conseguiría.

Todo lo que nos sucede en la vida, ¿tiene un por qué?

Por María Valero Navarro

En esta vida, ¿todo tiene un por qué?, pues yo creo que la respuesta es que sí. Desde toda la vida me ha rondado esta pregunta y siempre me ha apetecido expresarla o contársela a alguien, ahora he tenido la oportunidad de poder escribir una redacción sobre esto. A mí desde bien pequeña, mi abuelo me ha dicho que siempre las cosas pasan por algo, y yo a lo largo del tiempo me he dado cuenta de que tenía toda la razón. A lo largo de mi vida me han pasado cosas muy diferentes y a veces muy raras, por eso, muchas veces me he preguntado, ¿por qué me tiene que pasar esto a mí? o, con la de personas que hay en el mundo, ¿por qué me ha tocado a mí? Pero después pienso esto ya ha pasado, y si ha pasado es por algo, y ya encontraré la razón del por qué. Cuando me pasaban cosas malas muchas veces pensaba, tranquila después llegará algo bueno. Y muchas veces descubría el por qué me había pasado algo. También pensaba que a lo mejor lo malo tenía que pasar para que después viniera lo bueno o viceversa. Aunque no tenga muchos años de vida, cada año sé un poco más sobre la vida y hay cosas que en el pasado no entendía y ahora sí, como por ejemplo preguntas que yo me hacía y mi madre en muchas me decía “cuando seas mayor lo entenderás” pero esto me pasará a lo largo de toda mi vida, aún me sigo preguntado muchas de aquella preguntas y todavía no se la respuesta, pero, todo llegará y tendré el suficiente tiempo para aprender de esta vida y para resolver todas estas preguntas para las que ahora no tengo respuesta.

Una de mis muchas preguntas era “¿por qué mi hermano puede hacer eso y yo no? Y mi madre me contestaba “ya lo podrás hacer”, pero yo quería hacerlo en ese momento. Ahora ya hay cosas que le decía a mis padres que quería hacer que ya puedo. Hay veces que cuando te pasa algo malo para otras personas puede que sea lo contrario, y como en la vida no solo hay que pensar en ti mismo sino que también hay que pensar en los demás, cuando me ocurren cosas malas y a la vez para otras personas puede ser bueno pienso que, al fin y al cabo no es tan malo lo que me ha ocurrido. Y cuando es al revés sólo pienso en mi misma, como a mí me ha pasado algo bueno en esos momentos no pienso en los demás porque estoy feliz y la felicidad me hace apartarme de todo. En esta vida muchas de las cosas que nos ocurren son preguntas, en muchas tendremos la respuesta y en otras no, pero lo q si podemos saber siempre es, que tenga respuesta o no, siempre pasa por algo y siempre nos preguntaremos su por qué.

¿Mostramos al mundo lo que realmente somos, o lo que queremos que piensen que somos?

Por Carlos Bernabéu Martos

Hoy en día resulta muy fácil mirar la cuenta de Facebook, Instagram o de Twitter de una persona y creer que conocemos su historia de vida: quién es, qué hace –prácticamente todos los días-, qué piensa, cuáles son sus gustos , sus ideologías políticas, religiosas, etc.

El punto clave está en entender que lo que estamos viendo a través de las llamadas «redes sociales» es editado: más de una vez las personas editan la información que incluyen en sus perfiles de acuerdo a lo que consideran que va a ser más atractivo o interesante para el resto de las personas; lo cual –debo admitir- no me parece que esté del todo mal en tanto uno debe siempre buscar la mejor versión de sí mismo pero siempre debe haber un límite, y ese límite –creo yo- está en que dicha búsqueda se base en una imagen real porque cuando nuestro «ser» pasa a ser una versión construida de nuestra persona, a largo plazo, esta cortina de humo que construimos sobre nosotros mismos va a desmoronarse e inevitablemente producir efectos dañinos.

Hay que aprender de nuestras limitaciones: seamos realistas, no podemos ser los mejores en todo, sin embargo no debemos dejar de intentar mejorar día a día aquello que puede cambiarse.

Y establecer nuestras metas o rumbo de vida: OJO no te preocupes de llegar o no a tu destino, porque en realidad lo que cuenta es el camino que transitamos.

¿SUEÑO O REALIDAD?

Por Mar Mira Pérez

Y ahí estaba, sentada en la mecedora de espaldas mirando al infinito con aquella mirada de inocencia que suelen tener, pero…  aquella muñeca tenía algo impropio de un ser inanimado.

 Todo empezó una noche bastante sombría, algo rara, me había desvelado y no había forma alguna de dormir, pues la  lectura tampoco atraía mi sueño y decidí irme a dar una vuelta para ahuyentar así mis malos pensamientos. Vivía en una casa algo apartada del pueblo  y mi madre posiblemente ya habría caído en los brazos de Morfeo. Me quedé un instante mirando hacia el bosque que más tarde profundizaría con una sensación de waldeinsamkeit y me dejé llevar hacia él, la naturaleza me llamaba.

Al fondo del bosque había una casa de madera y pese a no estar muy lejos no me había parecido ver rastro suyo…  Allí dentro tenía una curiosa sensación de dépaysement pues sabía que ahí dentro no estaba del todo a salvo,  en aquel lugar solo encontré una diminuta y bella muñeca de trapo, sentada  en el centro de una mecedora que sin motivo alguno se balanceaba, me acerqué lentamente produciendo un chasquido a cada pisada que daba en las tablas de madera tan desgastadas y viejas, mis pulsaciones se aceleraban por minutos produciendo un sudor frío por todo mi cuerpo… ¿Y esa sensación? La sensación de no estar sola… Dicen que nunca estamos solos, me refiero al mundo del más allá, al de los espectros, que por alguna razón algunos se quedaron atrapados en el nuestro, unos para protegernos y otros para… quién sabe qué. 

Continué con mis pensamientos y un acto casi forzado por algo, me ordenó con un ademán a cogerla e irme. La apoyé en un árbol cuya corteza expresaba el dolor de las grandes lluvias que se originaban allí, me separé y me quedé observándola desde lo lejos (no sé en qué momento vi buena idea hacer esto) Una mirada con cierta schadenfreude, unos ojos brillantes, casi humanos, me observaban desde la profundidad de la noche…

-Schadenfreude: La alegría de ver sufrir o fracasar a alguien.

-Waldeinsamkeit: La soledad, sentirse solo en el bosque y conectado con la naturaleza.

-Dépaysement: Cuando te sientes extraño en un lugar que no es tu casa.

Momentos de una vida

Vivimos a ritmo de flash, esta era – la nuestra – nos embauca a tomar fotografías de todo cuanto sentimos, experimentamos, disfrutamos… porque nos ha obligado a creer que sin ese testimonio visual y su posterior publicación en redes, sería como si realmente nunca lo hubiéramos vivido, como si fuéramos ajenos a esa felicidad de la que muchos otros seres presumen. Sin embargo, mucho más allá de este canon imperativo, que algunos veneran y otros desdeñan, se encuentra el valor esencial de una fotografía, en ella no se quedan grabadas las risas, los comentarios divertidos, las anécdotas, ni tampoco el dolor o la alegría, ni la satisfacción de los sueños al fin cumplidos o la esperanza que se abrirá paso entre la tormenta; pero es bonito saber que en ellas siempre encontraremos los rostros que perdimos, la mirada que anhelamos, las sonrisas que nos hacen vibrar y, sobre todo, el recuerdo de tantos días que jamás olvidaremos.

Es un placer viajar a través de las imágenes a los lugares que conocimos, a los años que cumplimos, a las historias que contamos aquella noche de verano, al calor de la infancia, al abrazo de los que ya no están, a la luz de nuestro lugar preferido en el mundo, a un atardecer, a las primeras veces, al hogar…Quizá no guardemos muchas fotografías, porque puede que ellas vivan en la memoria de nuestro corazón, pero si tenemos algunas, las conservaremos como un auténtico tesoro.

Momentos de una vida es un trabajo pensado para que los alumnos/as fueran capaces de condensar en un collage algunos de los momentos más felices de sus vidas, y éste ha sido el resultado…

Débora Beneyto

Sintoniza con nosotros, ¡la mejor radio del mundo!

Un año más, nuestros alumnos y alumnas de 3ºESO se convierten por un día en periodistas radiofónicos para entrar en nuestros hogares con una programación tan interesante como ésta…¡Sintonicen sus transistores que empieza!

Aitana Jara, Alberto Martos y Pau Guillem
Nerea Antón e Inés Ruiz
Nati Jiménez, Sonia Ferri y María Valls
Carlos Navarro, Raúl Turcu, César Rodríguez y David Reche
Toni Escudero, Paco López y Adrián López
Cristina Valls, Aroa León, Daniela Hidalgo, Mar Valero y Paula Granero
Blair Rojo y Marina Tortosa

El lenguaje humorístico y poético de la connotación

En 3ºESO hemos trabajado en profundidad la diferencia entre el sentido denotativo y el connotativo, y, hemos reparado en cómo este último puede desempeñar a veces un papel humorístico, otras creativo y otras brindarnos la oportunidad de jugar con él de una forma tan ingeniosa como la que reflejan estas tiras cómicas y estos carteles publicitarios…

Nerea Antón e Inés Ruiz
Javi Requena y David Reche
Alberto Martos y Aitana Jara
Paula Granero y Cristina Valls
Sonia Ferri, Nati Jiménez y María Valls
Aroa León, Daniela Hidalgo y Mar Valero
Débora Pérez y Lucía Mercado
Rocío Marín, Sara Mercado e Irene López
Paco López y Pau Guillem
Alba Córcoles y Estela Martos
Paula Granero y Cristina Valls
Alberto Martos y Aitana Jara

Historia de nuestros refranes

Dicen de ellos que tienen la respuesta para todo, que incluso raramente se equivocan, y de hacerlo, siempre encuentran las palabras idóneas con las que enmendar su error. Podría acusárseles por ello de cierta pedantería, sin embargo, su carácter cercano, su retórica siempre sencilla y su naturalidad ante cualquier situación de la vida, por compleja que ésta pueda ser, no hace sino aumentar nuestra debilidad y confianza por ellos.

Su emblema es la sinceridad, no pretenden ser incisivos, ni mordaces, pero no pueden evitar que a veces su presencia incomode, pues son dignos defensores de la verdad, y ésta, aunque aclamada, a veces puede defraudar. Por ello, siempre aguardan prudentes, y antes de entrar en acción, se aseguran de saber que son bienvenidos. De hecho, nunca aparecen sin avisar, son bien respetuosos, y prefieren esperar nuestra llamada. Antes de pronunciarse, piensan a conciencia, porque saben que aquello que digan pondrá el broche final a cualquier conversación.

Tienen la admirable habilidad de no perder nunca el equilibrio, son estables e imparciales. Tienen bien aprehendido el sentido de la justicia, y por ello le dan a cada uno lo que le corresponde, velando en todo momento por encontrar el punto exacto de azúcar y sal.

Curtidos por la sabiduría popular, continuaron su formación gracias al apoyo incondicional de aquellas personas de gran corazón que les vieron crecer, las mismas que contribuyeron decisivamente en su madurez. Y lejos de renegar de su origen humilde, aprovechan cada ocasión para hacer alarde de ello y lucir con orgullo su pasado.

Nunca han estado de vuelta de nada, siempre mantienen los pies en la Tierra y nunca pierden su sentido. Y quizá esa postura les engrandece aún más.

Son la voz de la experiencia, y si nosotros lo deseamos, seguirán enalteciendo nuestro discurso.

Hablamos de…LOS REFRANES

Irene y Rocío

Las palabras más bonitas de nuestra lengua

Tras explorar durante algunas sesiones sobre el origen del castellano, pedí a los alumnos, como parte de un trabajo, que preguntaran a sus familiares y amigos por su palabra preferida. La pregunta, aunque sencilla, dio mucho juego, y algunos nos dejaron testimonios verdaderamente especiales.

Y tú, ¿qué palabra elegirías?

Inés Ruiz, 3ºESO
Mar Valero, 3ºESO
Aroa León, 3ºESO
Nati Jiménez, 3ºESO

Poemas de amor y desamor

La literatura siempre es fuente de inspiración, y mucho más, cuando está ligada al amor en todas sus vertientes. En estos poemas, nuestros alumnos y alumnas de 3ºESO cantan a este sentimiento, y al dolor que éste dejó tras de sí al cambiar su forma original por una lección de aprendizaje, porque de las experiencias más difíciles, nace la sabiduría más útil.

Angie Tapia
Blanca Ortega

Cuando te conocí por Joel Jiménez

Es de amor de lo que hablo yo.

Y es de desamor de lo que no quiero yo.

Por eso te pido, por favor, y con amor,

que no te separes de mí sin una buena razón.

Con tus ojos te tú me despejas.

Y con esa boca sabor caramelo me endulzas la existencia.

Y con ese olor a regaliz haces disfrutar a mi nariz.

Y con ese pelo ceniza haces arder mi corazón.

Con tu personalidad única,

como una obra de Dalí,

y por eso, y por mucho más,

me enamoré de ti el primer día que te conocí.

Tu amor me costó conseguir,

Igual que la Champions al Chealse.

Por eso que ya lo tengo, me propongo decirte,

que te amo hasta morir.

¿Qué huella quiero dejar en el mundo?

Cuando trabajamos en clase la inolvidable elegía de Jorge Manrique, Coplas a la muerte de su padre, tópicos latinos tan célebres como Ubi Sunt, Tempus Fugit, Vita Flumen…se hacen protagonistas en cada verso como una invitación irrechazable para que reflexionemos sobre la esencia de la vida. Venimos a ella con la esperanza de que sea extraordinariamente maravillosa, pero para conseguirlo, tendremos que caminar con paso firme por el mundo y que nuestra huella sea indeleble al paso del tiempo…

¿Cómo quiero que me recuerden? Por Mar Jiménez

Todos tenemos una función que debemos desempeñar al máximo a lo largo de nuestra vida, pues será el recuerdo que dejemos en las personas. Todos queremos dejar un legado, y quizá no aparecer en los libros de historia, pero al menos que nuestros más cercanos nos recuerden.

Si por un momento nos paramos a pensar, nos daremos cuenta de que nos recordarán por quién fuimos y cómo fuimos con los demás, y aunque también nos recuerden por lo que hicimos, los actos de una persona se reflejan en cómo es. Por eso, algún día, cuando yo no esté; me gustaría que aquellos a los que conocí se reúnan y me recuerden como una persona alegre, que luchó por conseguir sus metas y ayudó a los demás con las suyas. Y si en esos momentos de recordar y reflexionar alguna lágrima cae, quiero que sean de alegría y no de pena, porque al final todos nos iremos, dejando atrás todas nuestras aventuras para dejar a otros vivir las suyas.

También debemos dejar una marca uniendo fuerzas con otros, porque será difícil que nos escuchen si estamos solos, en cambio, si nos juntamos nos haremos más fuertes y aunque no nos recuerden, seguro que alguien al pasar años y años, dirá, “gracias a aquellos que años atrás lucharon hoy tengo posibilidades de cumplir mis sueños”. Porque si todas las huellas se unieran, crearían una muy grande. Si estamos aquí es para vivir nuestra vida y mejorar, no sólo las de los demás, sino también las de aquellos que aún no están.

Al fin y al cabo, únicamente necesitamos vivir la vida sin pensar cómo nos recordarán, pues al vivir iremos dejando huella en cada paso que demos, y cada paso es un avance y un cambio que no solo repercute en uno mismo, sino en otros que nos acompañarán. Entonces, queramos ser recordados por apreciar los momentos que teníamos con las personas que queríamos y no por no aprovecharlos. Y al llegar nuestro último suspiro digamos, estoy seguro de que me recordarán por todo lo que hice.

AMOR POST MORTEN por Lydia González

Me gustaría dejar huella de muchas formas, aunque la más importante es que quiero que me recuerden por mi forma de ser.

También como una buena jugadora de fútbol sala, ya que es el deporte que amo y practico cada día con esfuerzo, para conseguir llegar a algo.

Otros aspectos en los que me gustaría ser recordada es como abogada, el oficio que me gustaría desempeñar, porque creo que también tengo mucho sentido de la justicia, porque no hay cosa que me dé más coraje que algo sea injusta. Por ello me gustaría ser abogada y defender la justicia

Como otra alternativa, aunque no tiene nada que ver con la profesión que quiero estudiar, también me gustaría dejar mi huella descubriendo una cura para alguna enfermedad terminal como el cáncer, para poder ayudar a las personas que lo necesitan y sabiendo que he hecho algo bueno por alguien.

Aunque lo que realmente me importa es que me recuerde la gente que, de verdad me quiere, como alguien sobre todo muy sociable, amigable, honrada y por supuesto buena persona. Me es indiferente si no dejo huella con otras personas a las que no le importo, la opinión que me importa es la de mis amigos y mi familia.

CUANDO LES VENGA MI RECUERDO….Por Rosana Ruano

La pregunta, ¿Cómo te gustaría que te recordasen cuando no estés? Es una pregunta que a todo el mundo se la han preguntado alguna vez o incluso tú mismo. A todos nos gustaría que nos recordasen de una forma especial y única al resto de la gente.

Queremos que acuda mucha gente a nuestro funeral, que lloren desconsoladamente por el punto y final de tu vida, ya que eso significa que eres un ser querido y has hecho algo bien en la vida.

He escuchado y leído a varias personas famosas responder esta pregunta y parece más fácil de lo que en realidad es.

A mí no me gustaría ser recordada como una mala persona, por tener mala fama, por ser alguien ambiciosa y egoísta, o incluso por, en algún momento de mi vida, hacer daño a alguien. Pero hay varias cosas por las que sí me gustaría ser recordada, cómo, por ejemplo, por ser una persona sincera, generosa y alegre. Pienso que si quieres que te quieran tienes que saber querer, y vivir tu vida sin hacer el mal a nadie. Un dicho que me dice muy a menudo mi abuelo es “Vive y deja vivir”.

Cómo muy bien dice este tópico latino “Peregrinatio Vitae”, él viaje de la vida. La vida es un viaje que hay que aprovecharlo al máximo, y yo quiero aprovecharlo siendo buena persona y rodeada de la gente que de verdad quiero en mi vida.

Me considero una persona muy trabajadora y responsable y quiero seguir así hasta el resto de mis días. Que me recuerden así una vez ya no esté, porque “todo esfuerzo tiene su recompensa” y esa frase la tengo muy clavada dentro de mí.

Quiero ser recordada como una persona humilde y sencilla, siempre querida por los míos, y ójala que pueda servir de ejemplo en un futuro para alguien.

Creo que ser recordada mundialmente por esfuerzo deportivo o por incluso haber ganado algún premio es de admirar, pero me conformo con un poco menos. Me sobra con que me recuerden como una persona con muchas imperfecciones y nunca intentar conseguir la perfección en mí misma.

Quiero que cuando se les venga a la mente mi nombre, recuerden a una persona muy luchadora y que siempre se ha esforzado y ha luchado mucho por conseguir lo que busca y pone todo su empeño en lograr lo que de verdad quiere. Por ser una persona loca y hacer locuras, porque de eso va la vida.

LA HUELLA QUE QUIERO DEJAR por Sara Azorín

Hay muchas formas de dejar una huella, unas son más fáciles y otras más complicadas, pero sí o sí siempre dejas una.

Yo siempre que me aburro pienso en ese tipo de cosas, pero nunca llego a una conclusión. Yo desde pequeña he deseado salir en la tele, da igual cómo, pero quiero salir, o de presentadora, o para una entrevista, para un anuncio o para una serie, eso me da igual, pero quiero salir en la tele para que la gente me conozca. Y yo quiero dejar ese tipo de huella, salir en la tele, que la gente me conozca y después hacer algo que me marque tanto como a mí que como a la gente.

También quiero dejar huella más privada, quiero decir, algo que le marque a mi familia y amigos. Quiero que me recuerden como una persona humilde, amable, graciosa, sin malos rollos y que siempre está de buen humor. No quiero que me recuerden como alguien sin importancia porque desde mi punto de vista ……. que le importo a muchas personas. Otra huella que quiero dejar es escribir una frase en casa de mi abuela, ya que su casa es donde más nos juntamos todos los familiares porque tiene piscina y es muy grande. La frase es “LOCUS AMOENUS”. Esa frase me gusta mucho porque es lo que representa esa casa. Y yo creo que gracias a esa casa mi familia está unida y yo quiero que la casa pase generación en generación y sería muy bonito poner esa frase y que nunca olvidarán. Y bueno esta es la huella que quiero dejar, son tres y son diferentes pero son mis huellas y de momento solo quiero dejar esas tres, a lo mejor en un futuro quiero otras o añado más, quién sabe si en un futuro mi forma de pensar cambia. Bueno hasta aquí mi redacción, besos.

Mi pequeña huella por Celsa Guillem

MI LEGADO por Ximo Vilaplana

¿Qué nos espera después de la muerte? Supongo que la respuesta no está en este mundo, por eso desde que el ser humano tiene sentido de la razón es una pregunta que todos nos hemos hecho y, por supuesto, cada uno tiene una teoría.

Están los que creen en el Cristianismo y en la vida después de la muerte, en la vida eterna, también están los que creen en la reencarnación, o los que afirman que no hay nada después de la muerte, hay infinidad de teorías, pero yo pienso que no hay que estar todo el día pensando en la muerte, ya que nacemos y morimos, eso es innegable, pero al final lo que importa es lo que tú hayas hecho con tu vida y, sobre todo, no desaprovechar los mejores momentos carpe dien.

Hay una cosa de la que me he dado cuenta con el tiempo y es que cuando era más pequeño siempre estaba deseando que llegara el día de mi cumpleaños pero ahora siento todo lo contrario. No te voy a negar que no me guste que me feliciten y me hagan regalos, pero en el fondo tengo una sensación de tristeza, de pensar en todos los momentos que he desaprovechado, en cada minuto que malgasté haciendo algo que no quería. Así que todos los días que cumplo años me propongo no cometer los mismos errores y hacer las cosas que debería de haber hecho en ese momento.

Considero que tenemos una esperanza de vida muy escasa y que por ello hay que aprovechar la vida al máximo y adquirir todos los conocimientos posibles, además de fracasar más de una vez para poder aprender de los errores y que ese aprendizaje me lleve al éxito.

Por ahora soy muy joven y me queda mucho por aprender y me cuesta mucho imaginarme cómo seré hasta el fin de mis días y cómo seré recordado, pero me gustaría ser recordado como: una persona amable, amigo de sus amigos, fiel, alguien que siempre que podía te sacaba una sonrisa, una persona atrevida, seria en los momentos serios y el más feliz en los momentos felices, amigable, extrovertido, chistoso, alguien con un buen criterio gastronómico, razonable, alguien que siempre iba con la verdad por delante, un poco pesado, inteligente… Alguien merecedor de respeto y de admiración y, sobre todo, feliz.

Aunque sé que es complicado me gustaría dejar huella en muchas personas y nunca caer en el olvido. Ese sería el legado que me gustaría tener.

Ummm…¡qué bueno!

Se acerca el buen tiempo, y con él nuestras ganas de salir y festejar la vida. A nosotros, que somos tanto de celebrar, siempre nos alegra conocer buenas propuestas, porque si las circunstancias nos lo permiten, pronto podremos visitar algunos de estos carismáticos y sabrosos lugares…

EL CHAMBAO: SABOR A MAR

Ferran Vallcanera Díaz

Publicado el 22/04/2021 en el Blog El chiringuito de Ferran

Etiquetas: gastronomía, playa, chiringuito

La transformación de un simple chiringuito de playa en un gastrobar que nos ofrece cocina fusión y de alta calidad en un ambiente de sol, arena y mar. Un típico día de playa no está reñido con la degustación de un buen menú.

Se acerca el verano. Ya siento el aroma del mar y el sonido de las olas. Ya hay ganas de pasear por la playa, desconectar del estrés y disfrutar de una coca-cola, unas croquetas de pulpo y un arroz negro en el Chambao.

El Chambao es un gastrobar reinventado, ubicado en primera línea del mar en la Playa de les Deveses, una recóndita y oculta pero hermosa playa localizada entre Denia y Oliva, exactamente en la carretera de les Marines, en el kilómetro 13 de la playa de Santa Anna.

El dueño y che, Tino, se embarcó hace 4 años en la remodelación de un simple chiringuito de playa en un coqueto pero gran restaurante. Conserva su espíritu playero en la terraza, con sus cañas unidas con cordaje, permite la circulación natural del aire creándose una suave, y refrescante brisa en el interior del espacio creado.

Cabe señalar que el Chambao sólo abre 6 meses al año, desde abril hasta septiembre, con el resurgir de la primavera, y la llegada del buen tiempo.

Es importante señalar que el servicio de camareros es muy profesional buscando siempre la satisfacción del cliente.

La carta, aunque no es muy extensa gira alrededor de productos del mar de temporada y de paellas típicas y versionadas. Prácticamente todo el pescado y marisco procede de la lonja de Denia. Los postres son más bien escasos destacando el brownie con helado de menta y la carrot cake.

Podemos encontrar de entrantes tellinas, berberechos, mejillones, sardinas, sepia, boquerones, ensaladilla de merluza especial de la casa, croquetas de pulpo y de sepia en su tinta, verdura en tempura o ensalada de bocas de mar. Y como plato principal arroces típicos como “el del Senyoret” o versionados como arroz con espinacas y boquerones, arroz negro, caldero estilo Chambao….

Mientras esperas a ser atendido, el camarero te ofrece una degustación de aceite de oliva virgen extra acompañado de pan de cristal.

Recomendaría para empezar las croquetas de pulpo que tienen un rebozado con cereales crujiente y, por el contrario, una textura melosa en el interior con un sabor intenso a pulpo. La ensaladilla de merluza es otra delicatessen porque su mayonesa lleva un ligero toque de trufa. No me olvido de la verdura en tempura que puedes degustar con salsa romesco, ¡es exquisita!

Sin embargo, el plato estrella es el arroz con espinacas y boquerones. Servida en una típica paella grande valenciana por lo que el arroz está uniforme y con apenas un dedo de grosor. Al probarla, tus sentidos gustativos se llenan de mar, de ese mar salado y fresco. Además, tus sentidos visuales se llenan de verde, de ese verde esmeralda que el sol refleja en el mar, de ese verde intenso que aportan las espinacas. Y presidiendo el arroz, un círculo majestuoso de boquerones rebozados que le dan el toque original y realmente delicioso a este plato.

Entre ración y ración, bocado y bocado, vas contemplando el vaivén de las olas, las cometas de Kitesurf que van despegando a la par que se inicia esa brisa marina fuerte y que dan un toque de color a ese fondo azul del cielo y del mar. Te embarga la paz y la tranquilidad. ¡Esto es vida!

Casa Sicilia: Comer como en casa

Mar Jiménez León 22/04/2021 www.blogdecuisine.com

En esta bodega de Novelda (Alicante), puedes disfrutar de una comida tradicional, pero a la vez vanguardista, rodeado de viñas y naturaleza. Tendrás la oportunidad de conocer, a través de una visita guiada, la bodega; donde tendrás oportunidad de escoger entre los mejores vinos, aceites, conservas e incluso productos de cosmética elaborados con vino.

¿Cuál es el origen de este restaurante? ¿Cómo lo conocí?

La bodega en la que actualmente se elaboran los vinos Cesilia tiene su origen en la finca que el marqués de Romana creó en 1707: la Heretat de Cesilia, en Novelda.

Constaba básicamente de una casa, una huerta y una cantidad de tierra destinada al cultivo de cereales y viñas. A principios del siglo XVIII el puerto de Alicante era el punto comercial más estratégico de la región, y los vinos de su comarca, cada vez más prestigiosos y más demandados por la élite europea, eran exportados en grandes cantidades.

La familia Arias adquirió en 1984 esta hacienda, en la que está desarrollando un ambicioso proyecto enológico. Mediante una interesante fusión de tradición y modernidad, y con un equipo de profesionales de alto nivel, han convertido a los vinos Cesilia en todo un símbolo del Mediterráneo.

Conocí este restaurante por recomendación de un heladero de Ibi (Alicante), afincado en Novelda.

¿Qué nos ofrece su carta?

Cocina mediterránea con calidad de productos e ingredientes que añaden frescura y originalidad de sabores. La chef Mª Carmen Fuentes es la cabeza del equipo que está tras los fogones, que cada día trabajan para atender la carta y el menú diario, con los que deleitar a sus visitantes.

Yo opté por un menú degustación. En cada entrante nos servían diferentes vinos de la bodega. Entre otros, destaco La Cecina de León, cuyo sabor mezclado con el aceite creaban una combinación infalible.

Después de los entrantes apostamos por probar los arroces, en cada uno predominaba un vino. Las combinaciones entre arroces y vinos eran las idóneas. Unos me gustaron más que otros pero, sin duda, el mejor de todos fue el arroz al vino tinto.

Y por último, el espectacular postre con el que se cerró la degustación. Consistió en un coulant de chocolate negro perfectamente horneado con el chocolate derretido en su interior acompañado de una bola de helado de mantecao, típico de la zona.

A pesar de ser menú degustación las raciones eran generosas en relación a su calidad- precio, los platos, aunque eran tradicionales, tenían toques originales que le aportaban los vinos; además estaban muy bien presentados cuidando hasta el mínimo detalle.

¿Hay algún rango de edad? ¿Qué tipo de celebraciones suceden allí?

Por la comida no se preocupen si quieren llevar a los pequeños de la casa, puesto que hay menú infantil. Además, fuera hay una tirolina y parques donde los niños pueden jugar.

En este restaurante también se celebran bodas, bautizos, comuniones y más eventos.

¿Acompañan las instalaciones?

Sí, en la decoración predomina lo rústico, con muchos toques de madera en las bigas y techos, de esta manera consiguen un espacio cálido y tranquilo durante la comida . Algo curioso y que me llamó la atención fue un tramo del suelo acristalado a través del cual puedes ver las bodegas.

Entonces, ¿Es un buen sitio para ir a comer, cenar… ?

Sí, sí y definitivamente sí. Desde la comida, el exterior, la decoración, el trato y la calidad-precio son las mejores. Totalmente recomendable.

RESTAURANTE POLIDEPORTIVO

¿Estás cansado y no te apetece cocinar? Esta es de las mejores alternativas
para ir a comer o cenar: menús variados y buen trato.

Pablo Jiménez Pastor
22-4-2021
El comidista EL PAÍS

En la Calle Jaén se encuentra el polideportivo de Ibi, pero no solo es es un centro deportivo, también, en éste se encuentra, en mi opinión, uno de los mejores restaurantes de Ibi. La ubicación no es para nada mala, a pesar de que no se encuentre en el centro del pueblo, es bastante accesible, además, el aparcamiento no suele causar mayor problema.

Para empezar, no es necesario reservar con anterioridad, si es simplemente para ir tú con tu familia a comer o a cenar, si hay alguna mesa disponible (que es bastante habitual), te la dejarán y te servirán; en cambio, si es para una celebración mayor (del estilo de cumpleaños o comuniones), sí que será necesario reservar.

Este lugar es adecuado tanto para una simple cena con tu familia, como para la celebración de una boda.

Es un restaurante bastante grande, sin embargo, ese espacio no está desaprovechado y cuenta con gran cantidad de mesas y lugares, y la decoración no es mala ni monótona, las paredes están pintadas de una forma dinámica y cuenta con varios cuadros colgados, es una decoración simple pero le da un gran toque decorativo sin estar sobrecargado, además, la luz cálida y las decoraciones de las mesas, le dan un ambiente acogedor que hace que te sientas cómodo allí.

Al entrar, me saludaron amablemente y pregunté si había alguna mesa libre, me respondieron que sí y me guiaron a ella, me dieron la carta y se fueron (tal vez habría faltado que me recomendaran algún plato especial, pero es un detalle sin importancia). La carta era muy variada, y muy bien organizada en aperitivos fríos, aperitivos calientes, carnes y pescados; al poco tiempo, un camarero vino a preguntarme por los entrantes, yo pedí, algo simple: un plato con jamón serrano y queso, ensaladilla rusa, pulpo a la gallega y croquetas variadas. Así que… ¡Ahora toca esperar…! Me sorprendió la rapidez con la que me sirvieron estos entrantes, por supuesto, algunas cosas llegaron antes que otras, pero en general, con mucha rapidez. La comida no sería la mejor del mundo, pero en realidad tampoco tenía nada que decir en contra de ella, estaba buena… Y ya está…

Este restaurante, es sobre todo, famoso por los aperitivos, normalmente, cuando voy, simplemente me pido estos aperitivos y un postre, porque con eso ya te llenas y no necesitas un plato principal, así que, cuando pasó un camarero cerca para preguntarme, le dije que quería ya el postre. El camarero, esta vez sí que me dijo y me recomendó los postres que servían allí; yo, como siempre que voy, me pedí un mousse de chocolate negro. Y de nuevo tuve que esperar un rato (que esta vez, no sé por qué, pero fue más largo que el anterior) pero al final me lo sirvieron. Esta vez, sí que tengo que destacar que jamás he probado otro igual que ese: 10 de 10.

Al poco tiempo, me dieron la cuenta, no era caro, ni tampoco barato, se podría decir que era acorde a la calidad de la comida.

En conclusión, es un buen sitio para ir a comer, cenar o hacer una celebración mayor, ya que como ya he mencionado, el precio corresponde a la calidad, de hecho, se podría decir que es bastante barato para lo que es.

MERCATBAR: CUBALIBRE Y LIMÓN

BLANCA ORTEGA LEÓN 22/04/2021 – EL PAIS

¿Mercado, bar, gastrobar o viaje por el mundo? Experiencia gastronómica en Valencia

Hacía tiempo que queríamos conocer un restaurante de algún chef con Estrellas Michelín y como estábamos de visita en Valencia, pensamos que el Mercatbar del chef Quique Dacosta era una buena opción. Mercatbar es el más asequible de los cuatro restaurantes que Quique Dacosta tiene en la Ciudad de Valencia. El restaurante que Quique Dacosta posee en Denia, tiene tres Estrellas Michelin, en 2019 fue nombrado el cuarto mejor restaurante de Europa y unos de los cien mejores del mundo.

El Mercatbar está situado en la Calle Joaquín Costa, nº 27, en la zona de Cánovas. La decoración atiende a líneas modernas, quiere recrear un ambiente de mercado de tapas. Es sencillo y acogedor. Está decorado con productos típicos de la huerta valenciana.

La cocina está abierta y desde las mesas puedes observar a los cocineros elaborando los diferentes platos. Esta cocina está unida a una barra donde los comensales pueden comer directamente lo que el chef prepara.

Quique Dacosta fundó el Mercatbar en 2010, como un gastrobar al que puede acceder todo el mundo y donde comer cocina de autor a precios razonables.

Este gastrobar ofrece diferentes modalidades para comer y van desde El Esmorzaret, los sábados, domingos y festivos de 9:30h a 12:00h, La Vermutería, y cuatro menús que son Menú Diario y Menú Degusta, disponible los días laborables a mediodía, Menú Fan Beer y Menú Gárgola disponible de lunes a domingo. Dispone además de una carta muy variada.

Me decanté por el Menú Degusta que constaba de cuatro entrantes, un principal y postre para compartir por 26 Euros sin bebida.

Con las bebidas y antes de comenzar con los entrantes nos sirvieron unas palomitas con sabor a curry, me parecieron muy originales y sabrosas gracias al toque de curry y sal.

Los entrantes fueron los siguientes:

Ensaladilla rusa con emulsión de ostras servida en vasos de cristal, muy cremosa y suave, la puntuación sería de 7/10.

Tacos de pato Pekín con pico de gallo, la tortita estaba crujiente y el pato Pekín era muy suave en boca y la salsa de pico de gallo 8/10.

Cuba libre de foiegras con escarcha de limón. Este plato es delicioso, una mezcla perfecta entre lo dulce, por la escarcha de limón, y el sabor tan intenso que tiene el foie. Este es, sin duda, el plato estrella del menú. Mi puntuación en este caso 10/10.

Patatas bravas Mercatbar, con un ligero toque picante y servidas de forma muy original en una cabeza de buey. Están crujientes y cremosas. De las mejores patatas bravas que he probado, lo puntúo con un 8/10.

El plato principal es:

Tacos de carrillera de ternera, la carrilera estaba en su punto y buena de sabor servida en la tortita y con una salsa que estaba buena. Es un plato divertido, pero no fue mi favorito del menú a pesar de ser un principal, lo dejo en un 7/10.

El postre fue la guinda de este completo menú

Torrija con espuma templada de praliné. Este postre estaba delicioso, la torrija sabrosa y esponjosa y el praliné con mucho sabor. No quedó nada en el plato.

En mi opinión este restaurante cumple con las expectativas que tenía. La relación calidad precio es fantástica. Para ser mi primera experiencia en un Quique Dacosta no ha podido ser mejor. Un restaurante que sirve cocina del mundo. Fue como un viaje por diferentes continentes.

NATXO SELLÉS: PASIÓN POR LA COCINA Y LA TRADICIÓN

¿Platos tradicionales o platos modernos? En el restaurante Natxo Sellés, existe la mejor combinación de estos para innovar dentro de lo de toda la vida.

Paula Navarro 22/04/2021 – Paula’sculinaryblog.com

Este restaurante lo conocí gracias a las numerosas recomendaciones vistas en varias páginas web. Al ver las increíbles críticas que tenía el restaurante decidí reservar una mesa e ir a comer.

En cuanto a la decoración, superó mis buenas expectativas, un sitio muy luminoso, con una terraza acristalada y otra zona interior. Moderno pero rústico, así se definiría su decoración.

Interior del lugar.

La localización falla un poco, cuesta encontrar aparcamiento y pienso que este restaurante en una ciudad con vistas al mar o en algún pueblo con montaña y que desde la terraza se viera toda la sierra ganaría mil puntos, ya que las vistas son hacia una calle de un pueblo por la que pasan bastantes coches.

El trato fue increíble, tenía una reserva y al instante de entrar por la puerta había un camarero muy amable y atento esperándome, me acompañó a la mesa y me tomó nota de la bebida que tardó menos de tres minutos en estar en la mesa.

Me dio la carta, muy completa, a elegir entre comer de “tapeo” o de menú. La opción de comer de “tapeo” era muy variada, desde platos tradicionales como unas sencillas croquetas de campero hasta los platos más modernos como los dumplings de atún, quisquilla y jugo de atún. En el caso de elegir la opción de comer de menú, como hice yo, te ofrecen dos menús, el menú “El Laurel” que recibe este nombre ya que el restaurante antiguamente recibía este nombre, o el menú “Picaeta”.

En mi caso me decanté por el menú “El Laurel”, en el que había que elegir tres entrantes, un plato principal y un postre. Sin duda alguna, uno de los entrantes que elegí fue el plato estrella, HUEVO POCHÉ, HABAS, CARETA Y CREMA DE PATATA, increíble el contraste de sabores, de texturas y la inexplicable sensación que sientes al tomar un bocado de esta delicia.

El magnífico plato de huevo poché.

De plato principal, escogí el ARROZ CALDOSO DE PLATO, un sabor increíble, aunque hay que dejarlo reposar unos minutos desde que lo dejan en la mesa para poder disfrutar bien el magnífico arroz con pato que, de verdad, estaba increíble.

Arroz caldoso de pato.

El increíble chef Natxo es un apasionado confeso de la gastronomía, trabaja día tras día para acercar la cocina tradicional con toques de autor a la gente que decida darle una oportunidad a su restaurante y su cocina.

Natxo Sellés, chef del restaurante.

Relación calidad/precio está bastante bien, yo comí por 26 euros, que era el coste del menú que yo escogí, con lo mencionado anteriormente. Además cuentan con un menú que ronda los 21 euros.

María Carbonell, 3

03820, Cocentaina

Tel. 965 59 17 38

Terrarvm: una taberna entre mapas

Allison Mira 20/04/2021 13:15
El Mundo

¿Hay mejor lugar que un bar acogedor y hogareño que te transporte a otro país con su comida?. Terrarvm es el lugar indicado, una taberna cerca de una de las calles más transitadas en Alicante,y gracias a sus dueños, una pareja argentina muy dulce, como el mate; podrás viajar por mares y océanos hasta llegar a la mismísima capital de Argentina, Buenos Aires.

¿Y a vos te agradó el menú, o te quedás a lo que vos conoces?

La verdad es que siempre cuando hablamos de comida típica de Argentina
siempre(por lo menos yo) solemos pensar en las empanadas, el cocido, el dulce de leche… Mejor paramos porque se me hace la boca agua sólo de pensarlo. Pero la verdad es que al llegar no me esperaba tantos platos como tenían en la carta.

Para elegir el primer plato estuve muy indecisa, ¡no sabía qué escoger, todo tenía un nombre apetecible!, pero al final me decanté por la fainá acompañado de salsa chimichurri.

Nunca había tenido la oportunidad de probar ni de escuchar la fainá, y eso debería considerarse una grosería hacía la gastronomía argentina; la fainá es un plato típico de la región argentina, es una especie de pan achatado hecho con harina de espelta que puede ir acompañado con alguna salsa como el chimichurri(espero que alguien hable del buen encadenamient que he hecho para después hablar de la salsa) o para acompañar a una pizza argentina.

La salsa chimichurri es una salsa exquisita elaborada de perejil, ajo, vinagre, orégano, aceite de oliva y sal.

Esta combinación estaba para chuparse los dedos, pero nada se compara con el segundo plato. Otro mal de cabeza para mí, ¡otra vez no sabía qué elegir!. Pero en cuanto vi escrito milanesa en la carta, casi me desmayo allí mismo(menos mal que no lo hice, porque si no qué vergüenza).

La milanesa consistía en una típica milanesa napolitana con queso desecho por encima, jamón, tomate y una ración de patatas fritas. ¡Qué maravilla!.

Para el postre me decidí por los alfajores, uno de los postres más degustados de la cocina argentina( y normal, ¡la perfección hecha postre!).

Los alfajores son unos pequeños pastelitos a base de mantequilla, huevo, azúcar, almidón de maíz, harina, galleta, dulce de leche y chocolate. Bueno yo después de comérmelos creo que tuve azúcar en el cuerpo para varios años, pero un capricho al año no le hace mal a nadie.

¿De beber vos qué tomaste?

De alcohol nada, pero la carta de vinos estaba muy completa de vinos argentinos. Pero, para infusión no podía no elegir el mate, la bebida por excelencia argentina.

¿Y a vos te gustó la decoración?

La decoración del lugar(para mi gusto) era muy bonita, las paredes estaban
decoradas de fotografías de mapas antiguos, como los que hay en libros antiguos. Las mesas y los asientos están hechos de madera barnizada, dándole al lugar una visión de una buena taberna.

¿Caro o barato?, la pregunta clave.

Para las guarniciones grandes que sirven el precio no es caro, en total serían unos 25 euros por persona, e incluso venden bocadillos para llevar que van desde los 5 euros hasta los 10, dependiendo del tamaño.

Pintor Aparicio 32
03003, Alicante
966 20 01 60

EL BUEN GUSTO

Sara Azorín Rico 20/04/2021 13:15

Stuareg: Este bar, sin duda, es el mejor donde he ido, y sinceramente he ido a muchos, pero este destaca mucho. Ya no porque me guste la comida y esté cómoda sino que voy desde que tengo memoria y siempre me han tratado genial, y lo paso muy bien.

Lo mejor del restaurante es la decoración, es un lugar que tiene muchos comedores y muy grandes además, también tiene una terraza muy bien decorada y en ella tiene una jaula con muchos pájaros para que los niños se entretengan. El restaurante está muy bien estructurado y hoy en día la distancia entre las mesas está bien.

Bueno, y ya no te digo de la carta, madre mía eso sí es un espectáculo, para mi gusto sinceramente tiene muy buenas cosas y muy ricas. Hay algunas que, bueno, no es muy grande, quiero decir no impresiona mucho pero bueno todo está muy bueno. La carta es muy variada y tiene muchas cosas pero es comida típica. Eso sí hace unos arroces o una migas o unos gazpachos que madre mía, a eso sí que no lo supera nadie.

También hay que tener en cuenta los camareros y la tardanza en la que nos traen la comida. Los camareros en mi opinión, muy bien, muy amables y si tenemos alguna duda siempre nos la aclaran. Pero tardan mucho en venir a tomar nota, pero enseguida que nos la toman sacan muy rápido la comida y eso a mí me gusta.

Además la ubicación donde está situado esta súper bien, no está en el centro pero tampoco a las afueras. Y es un lugar donde pueden aparcar muy fácilmente.

Y por último el precio, la verdad es que está muy bien y todo muy barato la verdad.

Ibi/Alicante
Número de teléfono: 672 63 32 89


¿Qué me hace feliz?

Escribiendo estas líneas, un inefable sentimiento se apodera de mis manos, la libertad traza los renglones que el corazón sigue, puede que sea felicidad esto que siento, puede que aquello que persigo con fervor este delante mío, sin yo saberlo, puede que la vida me haya dado mucho más de lo que espero, y mi mente divague entre castillos polvorientos de arenas movedizas, anhelando un imposible que ya se hizo realidad hace tiempo.

Quizá sea ese poco el que hace mucho cada día. El sol que anuncia un nuevo despertar, el café que sabe a comienzo, el abrazo que te reinicia, un ratito en el sofá, un paseo aletargado, un libro que te pellizque el alma, un recuerdo que te haga sonreír, una llamada que te devuelva la mirada que tanto añoras, los sueños que encienden tu chispa, una voz familiar, una vieja fotografía, una ilusión compartida…

Y a ti, ¿qué te hace feliz?…

¿Qué me hace feliz? Por Ainhoa Castrillón

La felicidad es un sentimiento que nos llena en breves momentos de la vida, haciéndonos olvidar todos los recuerdos malos. Es algo que todos buscamos, anhelamos, pero que muy pocos logran encontrar.

Para mí la felicidad no se basa en los material, sino en el poder deslizar los dedos sobre la portada de un libro nuevo, tumbarse sobre la hierba y mirar el cielo, encontrarse con alguien al que llevas mucho tiempos sin ver…No obstante, la felicidad es algo que depende de nosotros mismos y de cómo sepamos valorarla; depende de cómo le sonriamos a la vida y a esos pequeños momentos de felicidad que nos ofrece.

Si de verdad queremos ser felices, debemos abrirle los brazos al mundo, a las personas, disfrutar todo los nuevo que nos pasa y sonreír incluso cuando no hay motivos para hacerlos. Es algo único poder ver a una persona que quieres, lograr algún objetivo o meta, esa felicidad que recorre su cuerpo y que llega hasta ti nada más con ver el brillo en sus ojos, te hace ver lo bonito de la vida, lo bonito que es el poder sentirse satisfecho al lograr eso que tanto esfuerzo has dejado en él hasta lograrlo. Estas pequeñas cosas que nos ocurren a lo largo de la vida es a lo que yo llamo realmente felicidad.

¿QUÉ ME HACE FELIZ? Por Allison Mira

Tras dar vueltas a mis pensamientos, intentando comprender qué era para mí la felicidad, he llegado a la conclusión de que la felicidad es un sentimiento al que vamos cambiándole el sentido, y a lo que me refiero, es que lo que pensamos o llegamos a sentir como “felicidad” hoy, puede llegar a cambiar o convertirse en un mal recuerdo o sentimiento el día de mañana.

Pero lo que yo en este momento siento como “felicidad” son vivencias que tras pensarlas me siento cómo si pudiera volver en el tiempo. Y todo es debido a las personas con las que he estado en esa circunstancia. Uno de los mejores recuerdos que tengo, y que me hacen pensar que esa es mi “felicidad”, la viví con dos de mis primos en casa de mis abuelos, ya que todas las tardes éramos nosotros tres, nos la pasábamos tan bien, que da pena decir que ya no estamos tan unidos como antes, que aunque peleásemos cada cinco minutos nos transmitíamos ese sentimiento de felicidad, tan poco valorado en esos años.

Pero claro, ese momento no es el único, también pondría en la categoría de “felicidad” todos los momentos “aprendiendo” a cocinar con mi abuela, y los días en que mi abuelo intentaba enseñarme a hacer cestas con esparto, o incluso cuando íbamos a visitar a mi tía el colegio en el que vivía, y yo me escondía en el coche para que pensara que no había ido a visitarla. También pondría todos los momentos que he vivido con gente que consideré y considero mis amigos, ya que si en ese tiempo fui feliz, y todavía se siente ese sentimiento, tan anhelado por algunos, se podría considerar que no está tan alejado de lo que es la “felicidad”. Pero claro, eso podría cambiar y todo debido al transcurso de la vida.

¿QUÉ ME HACE FELIZ? Por Ferran Valcanera

Es momento de detenerme y preguntarme qué es aquello que me hace feliz. Llevo tantos meses con miedo, ansiedad y autoconfinamiento que casi he perdido el sentido de lo que realmente tiene valor, todos aquellos momentos que me hacen disfrutar de la vida y, en definitiva, ser feliz.

Mi cuerpo vibra de dicha cuando llega el verano, los días se alargan y se huelen las vacaciones en la playa. ¡Ay la playa! Significa tanto para mí. Es motivo de reencuentro familiar, de paseos infinitos por la orilla, de construcción de castillos de arena, de practicar paddle surf, de observar la lluvia de las perseidas tumbado en la arena, de ir siempre en bañador… Es como si se detuviera el tiempo, no hay prisas, no hay obligaciones, no hay estrés. Únicamente existe el disfrute y la felicidad. Soy consciente que este período debe terminar para que pueda volver a empezar.

Otro de los momentos que me encantan es jugar al dominó o a las cartas con mi abuela. Casi siempre es la ganadora. Es como una adivina, sabe perfectamente las fichas o cartas que llevamos los demás para alzarse con el triunfo.

También valoro profundamente los instantes que comparto con mis amigos, aunque ahora lo hacemos de forma telemática por la situación sanitaria. Nos conectamos, jugamos y nos reímos muchísimo. Podemos pasar horas y horas así.

Alegría es caminar por la montaña, sobre todo en primavera. Se multiplica el color verde de los árboles, nacen las flores silvestres y corre el agua. Es un placer no escuchar el tráfico, ni voces ni ajetreo. Se respira paz y tranquilidad. Simplemente oyes el canto de los pájaros y tus pensamientos. Podría decir que un paseo por la montaña pone en orden tus ideas.

En definitiva, la felicidad es poder atesorar momentos a lo largo de tu vida con las personas que quieres y que te quieren porque quedarán siempre grabados en tu corazón y cada vez que te sientas triste sólo hay que rescatarlos para que la dicha permanezca en ti.

¿Qué me hace feliz? Por Laura Toledo

Pensándolo, hay muchas cosas que me hacen feliz, las pequeñas cosas de la vida, a mí no me hace feliz el dinero, a mí lo que realmente me saca una sonrisa son las pequeñas cosas, esas cosas que cuando se van no vuelven, por eso hay que disfrutarlas, como las tarde de verano con los amigos, los momentos de familia, las risas con la gente que me importa, en fin, todos esos momentos que se quedarán como un bonito recuerdo, esos momentos que no volverán pero que vendrán otros, también me hacen muy felices las vacaciones, las que más las de verano, pero, por otra parte, también me gusta ir a clase, aunque me pase la mayor parte del tiempo quejándome porque tengo que ir, en realidad es divertido porque ves a tus compañeros y amigos.

Esta época por la que estamos pasando por el Covid me ha hecho darme cuenta de muchas cosas y ha hecho que valore cosas que antes eran rutina y ahora echo de menos.

Hay una frase del Principito que se me ha quedado grabada que dice “ cuida lo que quieres, es carísimo perder lo que no tiene precio ” y ahora que lo pienso tiene mucha razón, al fin y al cabo lo que nos hace feliz son las personas de alrededor y los momentos con ellos, y todo eso un día se va, por eso hay que disfrutar porque nunca sabremos cuándo será el final.

Disfruta al máximo con esas personas, porque eso sí que te hace feliz no el dinero, ni las cosas materiales.

¿Qué me hace feliz? Por Mar Jiménez

Posiblemente no tenga una respuesta clara a esa pregunta, porque creo que no es “qué” sino “quien” me hace feliz. Obviamente podría decir muchos momentos en los que me he sentido feliz, pero podría afirmar que fueron las personas que me acompañaban las que hicieron de estos, unos momentos para recordar.

No tengo dudas de que mi familia son las personas que más feliz me han hecho a lo largo de mi vida. Todos me han visto crecer y yo a ellos, me han acompañado en los mejores momentos de mi aún corta vida, y también en los peores, y es por ello que cada vez me siento más orgullosa y agradecida de tenerlos.

Me hace feliz bailar, sobre todo con mis compañeras y con mi profesora. De ella he aprendido casi todo lo que sé sobre el ballet y me hace feliz ver cómo he evolucionado tanto en tan poco tiempo y también haber conocido a personas, que espero, sean para toda la vida.

De todos ellos me llevo muchas cosas: enseñanzas, momentos, viajes… Pero, ¿Y de mí? Soy feliz de ver cómo he aprendido, crecido, conocido a tantas personas que me hacen sonreír cada día; también saber que he intentado corregir tantos errores que he cometido y aunque no todos se hayan
resuelto, me siento orgullosa de cómo soy a día de hoy.

Y no me olvido de mis amigas. Ellas me han hecho reír sin poder para en muchas ocasiones, se han alegrado de mis logros y yo de los suyos; han hecho que vaya donde vaya pueda sentir que las tengo cerca y que podré contar con ellas y, por supuesto, ellas conmigo.

Ahora me falta una gran razón por la que era feliz. Pensé que sin ella no podría volver a serlo plenamente, pero hoy soy más feliz y agradecida por todos aquellos que, sin darme cuenta, me hacen sentir bien, querida y sobre todo feliz.

¿Qué me hace feliz? Por Martina Mollá

Todo el mundo piensa que cuando consigas la felicidad, algo que es visto como casi inalcanzable y en lo que debes de poner mucho empeño por conseguir, estarás satisfecho. Consideran que después de alcanzar esta supuesta felicidad todo será perfecto, piensan que tendrán todo lo que siempre han deseado, habrán cumplido todas sus metas y habrán conseguido todos sus logros, esa es la base de la felicidad que desde siempre nos han enseñado. Ese perfil de la vida perfecta en la que ya tienes todo hecho y vives sin ninguna motivación a la que aspirar. Sin embargo, desde mi opinión sería una vida bastante aburrida y monótona.

No querría ni desearía que nadie viviera en esta ¨deseada¨ realidad que nos engaña y nos acaba decepcionando, ya que caemos en la cuenta de que nada es tan bueno como nos lo imaginamos. Incluso me atrevo a decir que la mayoría de todas estas personas que persiguen esa felicidad inalcanzable, ni siquiera han llegado al punto de sentarse y reflexionar qué es para ellas ser felices. No creo que debamos centrarnos ni obsesionarnos con conseguir esa imagen falsa de felicidad que nos vende la sociedad, hay más emociones. Al fin y al cabo, acabamos experimentado cada una de ellas y de una forma u otra terminamos obteniendo una enseñanza ya sea positiva o negativa pero siempre aprendemos de ello.

Dejando esto a un lado, pienso que la verdadera felicidad se encuentra en los pequeños detalles, desde estar rodeado de tus amigos y seres queridos a simplemente escuchar tu canción favorita, es algo totalmente subjetivo. Algo que también considero importante es el éxito, ese éxito que consigues, por ejemplo, cumpliendo una de tus ambiciones y proponiéndote otras que puedas ir realizando con el tiempo.

En conclusión, considero que hay que disfrutar del presente, el aquí y el ahora, eso es lo que también nos ayuda a descubrir esa felicidad que está en las pequeñas cosas, a sentir lo que nos rodea, a agradecer lo que la vida nos ofrece, porque vida solo hay una.

¿QUÉ ME HACE FELIZ? Por Paula Moltó

A primera vista puedes imaginar una casa súper grande, algún coche, ropa bonita, amigos, cenas, viajes, etc. Y es verdad, me encantaría tener una casa súper grande y algunas de esas cosas, pero si te paras a pensar realmente, no valdría nada si no la llenásemos de momentos increíbles con gente increíble.

A mí lo que me hace feliz no son las cosas materiales, sino el poder disfrutar cada momento de la vida, cada segundo con los amigos, con la familia…Poder salir con mis amigas a dar una vuelta sentarnos a hablar y reírnos de cualquier tontería que digamos, el poder compartir tiempo con mi familia que ahora no podemos y es cuando te das cuenta de lo importante que son para ti y la falta que nos hacen y lo felices que somos juntos.

Tal vez para mucha gente la felicidad es algo imposible, pero yo no lo creo. En mi opinión todo depende de las fuerzas que tengamos para seguir luchando por lo que realmente queremos. Es posible que mientras que buscamos la felicidad no nos damos cuenta que somos felices y que en realidad no nos hace falta mucho más de lo que tenemos.

¿Qué me hace feliz? Por Rosana Ruano

Mi felicidad se resume en atardeceres eternos con mis amigas, días en la playa sintiéndome como una niña pequeña sin tener en mente otra cosa que no sea disfrutar. Paseos infinitos junto a mis abuelos por la playa de Benidorm, pensando lo afortunada que soy de tenerlos a mi lado. Momentos de soledad tumbada en mi cama mirando al techo y reflexionar sobre cómo soy y los aspectos que debo mejorar. Mis ganas después de un largo día en el instituto, volver a casa y demorar toda mi tarde en leer un libro que me vuelva loca o en ver mi serie favorita capítulo tras capítulo.

Felicidad es darme cuenta que mi esfuerzo ha merecido la pena al ver la nota de ese examen que tanto me había costado preparar. Esas tardes de domingo junto a mis padres en el sofá viendo álbumes y álbumes llenos de fotos y momentos capturados. Abrazar con mucha fuerza a una persona que no veías desde hace un tiempo. Escuchar una canción que me transporte a un momento especial. Tardes de verano junto a mis amigas y darme cuenta de lo afortunada que soy de tenerlas conmigo. Una simple visita a mis abuelos y que me cuenten anécdotas de cuando eran jóvenes.

Me hace feliz el simple hecho de darme una ducha de agua caliente con mi playlist favorita. Que mi abuela me dé un tupper de lo que ha hecho para comer. Un paseo en la moto con mi padre y que me dé el viento en la cara. Ir de viaje totalmente de imprevisto y pasear por las calles hasta que no puedas más con él dolor de pies. Una tarde de manta y Netflix viendo la película del momento. Una tarde de compras por las calles de Alicante junto a mi madre.

Estos son mis momentos más especiales, los que me hacen feliz día tras día.

¿Qué me hace feliz? Por Rubén Picó

Algo que te hace feliz es algo que te llena por dentro, es eso que sientes que te deja satisfecho es aquello que te gusta hacer, ver o escuchar…
Qué mejor ejemplo que la sonrisa de un familiar ya sea tu madre, tu padre, tu abuela o abuelo… eso me llena de energía, de ganas, de vida.

Acoge a esa persona que sepa hacerte reír, que te comprenda, que te haga feliz, que te acompañe en los buenos momentos y en los malos, porque todo forma parte de tí y si esa persona no te acompaña en esos momentos es que no es para ti.

Una de las cosas que más me hace feliz es ver una sonrisa y pongo a mano en el fuego a que pocas sonrisas de verdad se ven hoy en día, ya que una sonrisa no es sólo una mueca,una sonrisa te tiene que llegar al corazón y te tiene que tocar.

También podría hablar de esos días de invierno que hace frío pero hay sol, esos días me dan energía para seguir haciendo cosas, pero, si además, lo acompañas con una buena comida familiar con música de esa que nunca se olvida, que se queda grabada en ti pues aún mejor.

Me hace feliz ganar una partida, me hace feliz estar con los amigos y estar tranquilos hablando de algo en el sofá de Omar, me hace feliz hacer feliz a los demás y sentir que la gente de mi alrededor está feliz, porque creo que la felicidad depende en una gran parte del ambiente de tu alrededor y de la felicidad que te transmitan las personas que están contigo.

Con esto, lo que quiero decir es que muchas veces las cosas más tontas nos pueden hacer felices y por otras muchas, ni la tontería más grande es capaz de levantarnos el ánimo.

¿Qué me hace feliz? Por Ximo Vilaplana

¿Qué me hace feliz? La verdad es que es una pregunta bastante curiosa, ya que cualquier cosa por insignificante que sea nos puede hacer felices y al igual infelices.

La verdad es que hay una variedad bastante extensa de cosas que me hacen feliz, pero si te soy sincero no sé por dónde empezar, podría empezar diciendo las cosas que me hacen feliz en los días cotidianos como: cuando salimos al patio del colegio a descansar un rato, o cuando entrego un examen y sé que me ha salido bien, o cuando salgo del instituto después de un día duro y ya está lista la comida, o esas duchas por la mañana que te espabilan, que llegue una tarde y tenga todos los deberes hechos, cuando estoy un rato con mis amigos en los cambios de hora, o cuando enciendo el móvil y está cargado al cien por cien, cuando paseo a mi perra o cuando llego a casa y me recibe con mucho entusiasmo, cuando saco una buena nota en un examen, cuando estoy viendo mi película o serie favorita, cuando llega el viernes, cuando todos los findes de semana cenamos pizza o kebab, como éstas hay muchas aunque con los tiempos que estamos pasando a veces predominan los momentos tristes o de enfados.

Bueno ahora voy a hablar de las cosas que me hacen feliz pero que son más puntuales como: cuando me levanto un 15 de Septiembre (El día de mi cumpleaños), o me voy de viaje, o empiezan cualquier tipo de vacaciones ya sean las verano o otras, o cuando voy a un parque de atracciones, o cuando me acabo una serie o me la empiezo, cuando llegan las navidades, el día de los Reyes Magos, o mi primera noche en mi casa de campo en verano, o irme de fiesta con mis amigos y, cómo no, esos momentos en familia que te ríes, disfrutas y te sientes tranquilo…

La verdad es que queramos o no a lo largo de un día, siempre hay algo que te hace feliz, y eso es algo que agradezco mucho porque sin la felicidad no se disfruta y si no disfrutas no vives la vida y creo que eso es lo más importante.

Celebramos el Día de la Paz con estos deseos…

Éstas son las esperanzas de nuestros niños y niñas, ojalá, entre tod@s, podamos hacerlas realidad.

Ainhoa Martínez
Ferran Valcanera
Alicia Giner
Rubén Picó
Paula Moltó
Lucía Giner
Guillem Amorós
Ainhoa Castrillón